Selena Gomez no necesitó un solo vestido para decir ‘sí, quiero’. La cantante transformó su boda con Benny Blanco en un auténtico fashion show íntimo, apostando por tres diseños nupciales que contaron distintas facetas de su historia de amor.
De lo clásico al romanticismo artesanal y un cierre relajado para la fiesta, Selena demostró que el altar también puede ser un statement de estilo. ¿La guinda? Maquillaje Rare Beauty, fiel a sí misma hasta en el altar.
¿Cómo fue el primer vestido de Selena Gomez?
El debut nupcial de Selena llegó con un diseño de Ralph Lauren que parecía sacado de un sueño clásico, pero con un giro inesperado. Con un escote halter que dejaba los hombros al descubierto y una espalda descubierta hasta la base, la silueta equilibraba a la perfección sensualidad y sofisticación.
La falda amplia con cola redondeada aportaba majestuosidad, perfecta para las fotos entre jardines que la cantante compartió en Instagram al día siguiente de la boda.
Un vestido que, sin esfuerzo, la colocó en la lista de las novias más icónicas de la firma estadounidense.
¿Qué vestido eligió Selena Gomez para la ceremonia?
Si el primer look parecía insuperable, el segundo fue la verdadera sorpresa. Benny Blanco fue el encargado de mostrarlo en redes: un diseño de encaje delicado, también firmado por Ralph Lauren, que se intuye como el elegido para el momento del sí, quiero.
El aire artesanal del vestido se mezclaba con un romanticismo absoluto: encaje trabajado, silueta envolvente y un detalle que lo convirtió en una pieza profundamente personal.
Entre el tejido, se bordó un pequeño corazón con las iniciales S + B, un guiño íntimo y eterno a su historia de amor.
¿Y el vestido de la fiesta de Selena?
Porque no hay boda sin baile ni pastel, Selena apostó por un look con alma retro. Su tercer vestido de novia tenía un escote doble que enmarcaba el busto y una silueta ligera que, más allá de la simplicidad, respiraba un aire muy años 60. Ese minimalismo elegante y despreocupado, le dio un toque fresco y divertido a la celebración.
El más relajado de los tres, pero igual de inspirador, deja claro que las novias de 2026 no temerán cambiar de vestido para adaptarse al ritmo de su gran día.
¿Cómo fue el beauty look de Selena Gomez en su gran día?
Fiel a su estilo, Selena apostó por un maquillaje natural, luminoso y sin excesos, firmado —cómo no— por Rare Beauty. La piel se veía radiante, fresca y casi etérea, con mejillas apenas sonrojadas y labios en un tono nude que realzaban su belleza sin robar protagonismo a los vestidos.
El cabello, con ondas muy suaves y un acabado pulido, completó un look nupcial que respiraba sencillez sofisticada: nada recargado, todo en equilibrio.
Selena Gomez transformó su boda en una narrativa de estilo con tres capítulos nupciales: uno clásico, uno romántico y uno festivo. Tres vestidos, tres facetas de una misma mujer que, con Ralph Lauren y Rare Beauty, escribió su propia versión de lo que significa ser novia hoy.
