Sabato De Sarno se inspira en el estilo festivo de Jackie Kennedy Onassis con un toque de estilo Tom Ford.
Un año después de asumir uno de los mayores trabajos de la moda, el diseñador Sabato De Sarno tiene una fórmula para su nuevo Gucci: ‘grandeza casual’.
De Sarno necesitaba que este desfile fuera un éxito. La respuesta a sus primeras colecciones se podría resumir en: ropa bonita pero poca personalidad. Las cifras publicadas en julio mostraban que las ventas de Gucci habían caído un 20% interanual en el segundo trimestre de 2024.
Gucci Primavera-Verano 2025
Gucci es un gran nombre en la cultura italiana. La gente no solo espera estilo sino carisma. Con una primera fila en la que se encontraban el tenista italiano Jannik Sinner y la cantante Debbie Harry.
El desfile comenzó discretamente, con una chaqueta bomber color carbón, con cremallera hasta el cuello, combinada con pantalones a juego sobre zapatillas blancas.
Pero pronto tomó ritmo. Un par de vestidos largos en blanco y negro con aberturas laterales y detalles de metal dorado hacían referencia a la era Gucci de Tom Ford en los años 90.
En sí Sabato le está devolviendo a Gucci su ADN original. Pañuelos de seda y gafas de sol de gran tamaño, combinados con prendas de punto con cuello levantado y faldas cortas evocaban a Jackie Kennedy Onassis, un icono de la casa, homónimo del bolso más famoso de la marca, de vacaciones en Capri.
El vestuario de vacaciones de la ex primera dama estadounidense, con un toque de elegancia de Tom Ford para las noches de verano, es sinónimo de grandeza informal.
El nuevo camino de Gucci
De Sarno y su equipo llevaban camisetas con el lema ‘Familia, amigos, equipos, socios, amantes’. El espectáculo terminó con un clásico del pop italiano de Fiordaliso, dándole al desfile un toque muy italiano.
El diseñador dijo a la prensa que estaba ‘obsesionado’ con crear un ambiente ‘realizado y refinado… pero siempre con una actitud irreverente’. La grandeza informal, dijo, era ‘sastrería, lencería, cuero, siluetas de los años 60… y el momento en que el sol se sumerge en el mar al final de un día de agosto’.
De Sarno está subiendo el volumen de los colores de Gucci: rojo, verde y blanco. El rojo amapola clásico ya ha sido reemplazado por un rojo sangre intenso, que se ha convertido en el color distintivo de De Sarno.
Esta temporada cambia el tradicional verde de carreras por un lima neón, radiante en vestidos de fiesta de encaje y audaz en un abrigo de auto con ribetes de cuero verde oliva.
Una colección donde todas las piezas gustaron, discreta en lo ostentoso, pero completa en su diseño y estilo.
