A través de su arte y esencia francesa, CHANEL crea lazos indestructibles que forman parte de su historia, ejemplo de ello es su estrecha y profunda relación con Château Rauzan-Ségla y Château Canon que se remite a tres décadas atrás.
Eso implica una inminente celebración, un aniversario simbólico y un hito que resalta el tiempo necesario para restaurar por completo estas históricas propiedades a su antiguo esplendor.
La historia entre CHANEL y Château Rauzan-Ségla y Château Canon
Desde su adquisición, Château Rauzan-Ségla en 1994 y Château Canon en 1996 han sido el centro de un trabajo meticuloso, guiados por la visión y los valores de CHANEL. Una transformación que se desarrolló en tres etapas principales:
- 10 años de aprendizaje escuchando los terroirs (conjunto de factores ambientales) y respetando su ritmo.
- 10 años de consolidación, reestructuración y engrandecimiento con precisión y paciencia.
- 10 años revelando la plena expresión de estos viñedos como un guiño a la numerología tan apreciada por Gabrielle Chanel.

Un ritmo trifásico que evoca la estructura misma de CHANEL, cimentada en sus tres actividades emblemáticas: Moda, relojes y alta joyería, así como fragancias y belleza.
Tres universos en los que, como en el arte de la elaboración del vino, se expresan los valores fundamentales de la Maison: Tiempo, savoir-faire y creación.
Entre la moda y el vino
CHANEL junto Château Rauzan-Ségla y Château Canon comparten valores que hacen que su lazo sea aún más inquebrantable y estrecho.

El tiempo
El tiempo es tan esencial, tanto en la viticultura como en CHANEL. Comprender un terroir requiere tiempo, al igual que crear una silueta, elaborar una pieza de alta joyería o componer un perfume.
El respeto por los ciclos naturales, la atención a las estaciones y la maduración son cualidades que comparten la viticultura y el universo de la Maison.
El savoir-faire
El savoir-faire es la esencia de esta alianza. Rauzan-Ségla y Canon honran la excelencia de los gestos transmitidos, la precisión de los artesanos y la atención al detalle, sellos distintivos de CHANEL.
Ya sea en las bodegas o en los talleres, manos expertas dan vida a obras con carácter, fruto de una dedicación serena e inquebrantable.
La creación
La creación es el aliento compartido que anima cada proyecto de la Casa. Elevar un terroir, interpretar una añada, reinventar un estilo o una fragancia: se expresa la misma audacia creativa, fusionando tradición e innovación para escribir nuevas historias de excelencia.
A través de esta celebración, las bodegas reafirman su compromiso con la autenticidad, la transmisión y el arte de preservar lo esencial.
Ya sea un grand cru o un gesto de alta costura, todo comienza con una visión, se construye con el tiempo y crece con la creación.
Sobre Château Rauzan-Ségla

Fue en la región de Médoc donde comenzó la historia de los viñedos de CHANEL en 1994. En el corazón de la denominación Margaux, Château Rauzan-Ségla es una de las grandes referencias del Médoc. Clasificada como ‘Segundo Crecimiento’ en 1855, la finca, fundada en el siglo XVII, cultiva el arte de la mezcla y la finura.
Las 70 hectáreas de viñas se benefician de un terroir de grava profunda, que ofrece a las variedades de uva Cabernet Sauvignon, Merlot, Petit Verdot y Cabernet Franc un entorno noble y poderoso para la expresión.
Bajo la guía de CHANEL, Rauzan-Ségla ha experimentado un renacimiento impulsado por un enfoque exigente, que combina la innovación técnica con el respeto por la tradición. El resultado es un vino de estructura vivaz, complejidad aromática y notable longevidad.
Sobre Château Canon

Enclavado en la cima de la meseta caliza de Saint-Émilion, Château Canon encarna el alma del pueblo al que está intimamente ligado. Conocido como Premier Grand Cru Classé, la finca abarca 34 hectáreas de viñedos, 24 de ellos clasificados, en un entorno de muros de piedra seca y laderas inclinadas, donde el Merlot y el Cabernet Franc florecen en armonía.
Desde su adquisición por CHANEL en 1996, Château Canon ha recorrido un camino de excelencia, uniendo el respeto por el terroir, la precisión vitivinícola y el refinamiento en la expresión de cada añada.
Este histórico y característico lugar produce vinos de una elegancia excepcional, marcados por su profundidad, frescura mineral y un excepcional potencial de envejecimiento.
CHANEL y su presencia en el mundo vitivinícola
Con el compromiso de preservar un savoir-faire y una experiencia excepcionales, CHANEL ha establecido una discreta presencia en el mundo vitivinícola desde 1994.
Unidos bajo el nombre de LES VIGNOBLES, Château Rauzan-Ségla, Château Canon, Château Berliquet y Domaine de I’lle comparten la misma ambición: elevar estos terroirs únicos con los más altos estándares y precisión, y producir vinos con carácter, siguiendo los valores y tradición de CHANEL.
Es por eso que cada uno cuenta una historia, moldeada por la naturaleza y enriquecida por el ingenio humano.
Ubicados en dos de las regiones vitivinícolas más históricas de Francia, Burdeos y Provenza, e impulsados por la misma visión a largo plazo, LES VIGNOBLES se comprometen a cultivar y compartir un patrimonio vitivinícola único con un espíritu de autenticidad y excelencia.