El enfoque vanguardista y experimental de Glenn Martens se fusiona con el archivo de H&M para darnos una colaboración que atrapa la mirada, poniendo sobre la mesa ropa que se siente auténtica, es fácil de combinar y toma nuestras tendencias favoritas sin perder el efecto sorpresa. Un ejemplo viviente de lo que la mente del director creativo de Maison Margiela y Diesel puede lograr al unirse con una marca accesible y moderna.
El objetivo de esta colección es celebrar la individualidad y el estilo personal, dándole poder al usuario para crear looks poco convencionales con la seguridad de que el resultado final será un outfit perfecto.
Para lograrlo, Martens buscó en el pasado de H&M las piezas favoritas del público: desde camisetas superventas hasta camisas a cuadros, chaquetas bomber y jeans.
¿Qué distingue a las prendas femeninas de esta colección?
El impacto visual es protagonista en la línea femenina. Una camiseta básica de manga larga se combina con un estampado que simula un top tejido del archivo de Martens. Un vestido largo y ceñido incorpora cuadros del archivo personal del diseñador, mientras que la falda satinada más vendida de H&M se transforma en un kilt, inspirado en el humor y estilo británico que Martens admira.
Los cuadros y tartanes aparecen a lo largo de la colección, y la imagen de un castillo escocés se integra en sudaderas y conjuntos de dos piezas, agregando un toque inesperado.
Incluso las piezas más discretas reciben detalles distintivos: un top con microtirantes transparentes ofrece un look sutil pero estructurado que sorprende.
La energía lúdica y la personalización son constantes: broches en jeans y vestidos permiten modificar su forma en cada uso; pantalones cargo con volumen extra crean siluetas llamativas; y prendas de punto trenzado incluyen tiras que pueden acomodarse de distintas maneras alrededor del cuerpo.
Incluso los márgenes de costura se muestran como elementos visibles, creando franjas de color que destacan el proceso de confección.
Renovación de los esenciales: abrigos y prendas imprescindibles
El abrigo negro clásico de H&M se renueva con dobladillos tipo pañuelo, aberturas pronunciadas y botones con logotipo. La colección también incluye jeans y ropa deportiva versátil, así como faldas vaqueras, camisetas oversized y conjuntos de sudadera, una de ellas en tonos grises acompañada de cintas largas que se pueden amarrar a la cintura, permitiendo ajustar la prenda y darle un toque más entallado.
La creatividad del diseñador belga no tiene parámetros: cualquiera puede usarla, solo se necesita buen gusto y creatividad. En su colaboración con la marca sueca, presentan looks unisex. Un ejemplo es la gabardina con interior metalizado en el cuello y un blazer con lámina metálica que permite modificar su forma.
La famosa camisa a rayas azules de Martens incluye alambre en el cuello para configurar formas esculturales.
¿Qué elementos sobresalen en la colección masculina?
Quien crea que la moda masculina es aburrida definitivamente no ha visto el trabajo de Martens. La colección masculina es concisa pero rica en detalles: chaquetas bomber con lámina metálica para moldear al gusto; camisas a cuadros clásicas; y chamarras que se transforman en modelos oversized con alambre integrado, que se pueden envolver como bufanda o arrugar alrededor del rostro.
Algunas piezas incluyen logotipos removibles de Glenn Martens en velcro, facilitando la personalización.
Los tejidos de punto trenzado en azul marino lavado destacan la historia de la ropa, mientras que los suéteres clásicos de H&M se convierten en base para ilusiones ópticas impresas en camisetas de malla.
El desgaste natural es un elemento clave: deshilachados, pliegues en denim y prendas casuales aportan sensación de antigüedad y profundidad. Las prendas deportivas presentan patrones a cuadros impresos en el reverso del tejido de felpa, y los paquetes de ropa interior se actualizan con logotipos y nuevos colores en edición limitada, un lujo en los detalles.
Los accesorios de Glenn Martens x H&M
Los accesorios complementan y destacan la colección. El bolso Lava, con técnicas de alambre y lámina metálica, puede arrugarse y estirarse en diversas formas, disponible en imitación cuero o denim azul.
Las joyas, exageradas en volumen, recuerdan reliquias antiguas reinterpretadas de manera contemporánea. Un pañuelo de seda reproduce collares vintage en estampado trompe-l’œil, mientras que las gafas de sol combinan dos monturas en una, jugando con capas y transparencias.
Los cinturones tipo cuero se ajustan con nudos en lugar de hebillas tradicionales, lo que permite conservar las siluetas esculturales de las prendas.
El calzado también se transforma: el clásico botín de caña alta de Martens reaparece en esta colaboración, acompañado por una bota de trabajo masculina con puntera de acero que incorpora broches ajustables. Estos permiten alterar su silueta, reforzando el concepto de que cada pieza puede adaptarse al cuerpo y estilo de quien la lleva.
