Ya estás familiarizado con el ‘pebbling’ si eres de los que siempre envían memes, videos o enlaces a tus seres queridos. Esto con el fin de demostrarles que los tienes en mente. Es un fenómeno social que, aunque no es nuevo, ha cobrado relevancia en la era digital.
Este comportamiento, cuyo nombre proviene de una adorable práctica de los pingüinos. Es más que un simple acto de compartir contenido: es una forma de fortalecer vínculos. Pero, como toda tendencia, el pebbling tiene sus pros y sus contras, y los expertos explican por qué.
¿Qué significa Pebbling?
El término ‘pebbling’ puede que no te suene familiar, pero si eres una persona con redes sociales, seguramente lo has experimentado. Se refiere al acto de enviar a tus contactos (amigos, pareja, familia) memes, videos o enlaces para mostrarles que estás pensando en ellos.
Ya sea un video gracioso de gatos, una receta interesante o un artículo que sientes la necesidad de compartir, si lo estás enviando por mensaje directo, estás haciendo pebbling.
El origen del término es tan tierno como el acto mismo. Proviene de una práctica de los pingüinos Gentoo de la Antártida, quienes, para construir lazos con una pareja potencial, le llevan guijarros (o ‘pebbles’) cuidadosamente seleccionados, uno a la vez. Si el otro pingüino se siente suficientemente cortejado, utiliza esas pequeñas piedras para construir un nido y, potencialmente, una vida juntos.
Los seres humanos hemos ‘pebblado’ a nuestros amigos y seres queridos durante siglos, enviando postales, recogiendo una flor ‘solo porque sí’ o comprando pequeños detalles. Sin embargo, en la actualidad, el término se ha popularizado en redes sociales para describir específicamente este uso digital de la comunicación. Se convierte en una parte integral de cómo nos conectamos en la era digital.
¿Por qué se practica el pebbling?
Los profesionales de la salud mental coinciden en que el pebbling es un comportamiento arraigado en la necesidad humana de conexión. La terapeuta Natalie Rosado explica a Yahoo Life que ‘en la era digital, pequeños gestos como compartir un meme o un video pueden fortalecer significativamente los lazos emocionales’. Estos ‘tokens de afecto’ sirven como un recordatorio constante de que alguien se preocupa.
De hecho, un estudio de 2023 publicado en First Monday encontró que compartir memes juega un papel significativo en las relaciones cercanas, y que compartir memes divertidos en particular se asociaba positivamente con los niveles de satisfacción relacional de los participantes.
La psicoterapeuta Jessica Hunt añade que el pebbling también actúa como un puente generacional en las redes sociales. Es más común entre la Generación X y las generaciones más jóvenes. Los boomers están cada vez más cómodos con esta tecnología, usándola para mantenerse conectados con sus seres queridos.
‘No está tan lejos de reenviar ese correo electrónico lleno de chistes que mi abuelo me enviaba casi semanalmente’, comenta Hunt. Por lo tanto, el pebbling no se trata tanto del tipo de contenido que se comparte, sino del acto de compartir en sí mismo.
Según la consejera de salud mental Shainna Ali, la consistencia del pebbling en sus diversas formas es que dice: ‘Estoy pensando en ti’. Desde una perspectiva relacional, muchas personas encuentran valor en esta conexión, ya que puede profundizar la comunicación y la validación.
Aquí te presentamos algunas otras razones por las que personas de todas las edades están recurriendo a este tipo de comunicación:
Una de las principales ventajas del pebbling es que resulta eficiente. Muchas personas que se sienten intimidadas por la idea de llamar por teléfono a un amigo lejano pueden recurrir a esta práctica para decir ‘Hola, te quiero’ de forma rápida y sencilla. La terapeuta Mariam Hager señala que, para muchos de sus clientes, el pebbling es ‘todo lo que pueden manejar con las vidas ocupadas que llevan’.
Además, es de bajo riesgo. La terapeuta Rachel Goldberg explica que el pebbling se utiliza cada vez más para mucho más que los antiguos correos electrónicos de bromas. Así, además de compartir contenido positivo o divertido, el pebbling también puede ayudarnos a abordar emociones más negativas de una manera de bajo riesgo y menos confrontativa, permitiendo ‘expresar sentimientos que pueden ser difíciles de articular directamente’.
Por otra parte, genera un impacto emocional. Estos pequeños detalles digitales pueden alegrar el día de alguien e incluso reducir los sentimientos de soledad o estrés, como señala Rosado. ‘Saber que alguien se tomó el tiempo de compartir algo adaptado a sus intereses o sentido del humor es validante y reconfortante’, explica.
Finalmente, es accesible e inclusivo. El pebbling puede tener un gran impacto a pesar de que requiere mucho menos esfuerzo que los lenguajes del amor tradicionales. Como el dar regalos o los actos de servicio. Incluso, Rosado explica que ‘trasciende las fronteras geográficas y las zonas horarias, lo que lo convierte en una forma universalmente accesible de mostrar afecto’.
¿Cuándo el pebbling se convierte en un problema?
Si bien el pebbling tiene muchos beneficios, no es un reemplazo para los pilares cruciales de la construcción de relaciones, como las conversaciones cara a cara y el contacto físico. Si te encuentras constantemente recurriendo a un meme como método para evitar esas conversaciones y conexiones más profundas, es hora de hacer una ‘verificación de la realidad del pebbling’.
‘Aunque los guijarros pueden acumularse para tener un impacto, no son reemplazables por una comunicación esencial’, advierte Shainna Ali. Ella explica que en relaciones más profundas, especialmente en momentos de conflicto, tu ser querido podría percibir tu pebbling ‘como una forma de evasión o de desprecio de los problemas presentes’.
No obstante, en lugar de juzgar la propensión al pebbling como superficial o inútil, Hager recuerda a sus clientes. ‘Que si se sienten desconectados, pueden interactuar de diversas maneras con sus seres queridos, devolviendo la elección y la agencia a la ecuación de la comunicación’.
Esto no significa que el pebbling no tenga su lugar. ‘No es una cosa de ‘o esto o aquello», dice Hunt. ‘Ambas formas de comunicación tienen su espacio’.
Así que sí, deberías dedicar tiempo a las conversaciones más profundas. Pero cuando te sientas abrumado por las exigencias de una vida ajetreada, aún puedes encontrar un momento para compartir ese TikTok que sabes que hará reír a tu viejo compañero de universidad. Esa es, precisamente, la belleza del pebbling, es decir, un pequeño gesto digital que mantiene la llama de la conexión viva en la distancia.
