Hemos sido testigos de la carrera en ascenso de Roberta Damián, una actriz e intérprete de nacimiento que inicia un nuevo camino en la música con un proyecto íntimo, donde el género urbano se vuelve su pista de despegue y la búsqueda de identidad la impulsa a salir de su zona de confort.
Con su segundo EP, la actriz y cantante nos habla de libertad creativa, corazones rotos, vulnerabilidad y de lo que significa hacer ‘reggaetón cute‘. Una nueva voz femenina que conecta con jóvenes y adultos, se posicionará en nuestras playlists favoritas y nos recordará que los sueños sí se cumplen y el destino se puede moldear.

Foto: @infiernno
Transición de actriz a cantante
La estrella mexicana ya había dado señales de evolución en el pódcast ‘Un Elefante en la Habitación‘, de Marie Claire, donde habló de su amor por la música y cómo un corazón roto la llevó a componer. Meses después, más fuerte, lista y sin miedo a ser vulnerable, encontró en las canciones una manera de decir lo que no cabe en los diálogos.
‘Encontré la libertad artística de poder decir, hacer, vestirme y ser quien realmente soy’, así comienza la entrevista con Roberta Damián, quien detalla cómo ha vivido el cambio en su carrera profesional.

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Sobre su tiempo frente a los reflectores agrega: ‘La actuación es una profesión hermosa, pero muchas veces estamos más limitados en cuanto a reflejar quiénes somos realmente. Te enamoras del personaje, más allá del actor. En la música es todo lo contrario […] estás contando historias personales […] Es un nivel artístico mucho más personal‘.
La mayor diferencia entre ser actriz y cantante es la oportunidad de ser honesta con ella misma: ‘Cuando actúo, soy lo que el personaje requiera. Cuando canto, soy 100% yo‘, añade, dejando como reflexión la importancia de conocernos más allá de lo superficial.
El poder de componer desde el corazón roto
Roberta Damián supo cómo tomar un dolor universal, como un corazón roto, y convertirlo en una fuente de inspiración que resuena con su audiencia. Aunque para ella componer desde estas emociones se le da de manera natural, no se encasilla en esta temática:
‘Siempre que quiero escribir una canción de amor, termino haciendo una que no lo es del todo […] todavía sigo descubriendo quién soy yo cuando hago una canción de amor‘, comparte.
Y es con sus sencillos, EP y nuevos proyectos que podemos conocerla más allá de su imagen de actriz o de su estética moderna:
‘Creo que realmente nunca terminas de conocer a una persona, y ni siquiera yo sé realmente quién soy en su totalidad. Lo sigo descubriendo a la par que avanzo como compositora, cantante y actriz. Tal vez una Roberta más vulnerable‘, confiesa.

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Reggaetón cute: Una nueva propuesta en el género urbano
Si tuviéramos que describir la estética visual de Roberta, diríamos que es un caos con orden. Un día puede tener los corridos a todo volumen y al siguiente cantar lo mejor de Charli XCX. Un salto de gustos que se refleja en sus fotos y letras, recordándonos que no se pone etiquetas, ya que su viaje de autoconocimiento sigue en proceso.
Las mujeres pueden sentirse identificadas con su voz y visión femenina, aunque sus canciones son para todos y todes. Ahora, bajo el concepto de ‘reggaetón cute‘, explora una fusión urbana que le permite sentirse cómoda sin renunciar a la profundidad lírica.
Usa muchas metáforas y su manera de escribir no es lo común en el urbano, así que le dio su propio nombre.
Para quienes buscan sanar bailando, recomienda tres canciones de su autoría para superar un corazón roto: Pastel para dos, Amén y Me vi. Letras que duelen, pero se cantan a todo pulmón.
Honrando el pasado y abrazando el futuro
Aunque hoy su atención está puesta en la música, la actuación sigue siendo parte de ella: ‘Tiene un lugar súper importante en mi corazón. Nunca va a estar cerrada esa puerta, porque es algo que amo hacer‘.
Con 22 años, una carrera que apenas inicia, un recorrido con cimientos fuertes y el corazón en la mano para componer, la artista encuentra felicidad:
‘Estoy muy contenta de seguir mi corazón, mi intuición y lo que quiero hacer. Obviamente con mucho miedo […] hay días muy oscuros, en los que no estoy feliz […] me invaden dudas, pero sin eso no podría reconocer los momentos felices‘, concluye.

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Siempre se necesitan voces femeninas en la industria del entretenimiento y Roberta Damián ha levantado la mano para ser parte de ellas. Escucha su segundo EP, síguela en redes y forma parte del movimiento ‘cutie’ que pronto envolverá a las masas en una ola rosada de ritmos y autenticidad.