El estrés es un componente normal en nuestra vida, pero cuando se vuelve incontrolable puede tener consecuencias importantes en la salud, especialmente en el cerebro
Todos en algún momento de nuestras vidas hemos padecido estrés, y para entender los efectos negativos que causa en el cerebro debemos comenzar por definir qué es, qué lo causa y cómo afecta nuestra salud.
El estrés es una respuesta normal del organismo que se desencadena por amenazas reales que ponen a prueba nuestra supervivencia.
Para nuestros antepasados sufrir este tipo de estrés no afectaba a la salud porque su presencia en la vida se limitaba a conseguir ropa, vestido y calzado.
Con el paso del tiempo, nosotros nos vemos más afectados porque nuestras presiones van en aumento.
Dentro del tema laboral, social, familiar, la incertidumbre sobre el futuro o cualquier situación económica desencadenan parte de este estrés y a eso, hay que añadir que vivimos en mundo completamente acelerado.
Respuestas negativas del estrés
Ante estas situaciones, el cerebro tiene una respuesta negativa y procesa la información de otra manera intentando eliminar cualquier tipo de amenaza.
Cuando nos sometemos a un nivel de estrés que sobrepasa los límites, repercute en el cerebro, aunque como seres humanos disponemos de mecanismo para hacerle frente, pero como en todo, dependerá de uno mismo cómo lo afrontemos.
¿Cómo puede afectar a tu salud?
Cuando este sentimiento se sale de control se produce un aumento de la hormona cortisol, que se produce en las glándulas suprarrenales en la parte superior de cada riñón y actúa como un neurotransmisor en nuestro cerebro.
Una de las partes más afectadas es el hipocampo-lo hace pequeño-, ya que en él hay más receptores de dicha hormona, mata sus células y las dendritas comienzan a marchitarse lo cual es perjudicial para la anatomía y el cerebro.
También afecta la plasticidad neuronal o neuroplasticidad-capacidad cerebral- que bloquea al cerebro a adaptarse a diferentes situaciones. Cuando los niveles de cortisol están balanceados, actuamos en armonía, por ello debemos buscar un equilibrio ante este sentimiento.
Síntomas de un cerebro estresado
Los cambios en el cerebro pueden ser catastróficos, pues suscita la aparición de numerosos trastornos neuropsiquiátricos como el estrés postraumático, la ansiedad y la depresión.
Es un problema de “muerte lenta”, si no se trata a tiempo puede desencadenar enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, además afecta en el desarrollo diario, en la toma de decisiones, la concentración y retención de memoria.
Un descanso para tu mente
Existen diferentes actividades que podemos realizar para regular el estrés en nuestra vida.
Hacer ejercicio por lo menos tres días a la semana durante 40 minutos es benéfico, al igual que tener una alimentación saludable, meditar, entre otras, pero sobre todo es importante que busques ayuda con profesionales de la salud.
