Provocar sonrisas a través de grandes detalles…
La presidenta de Fundación Cassava Roots, Daniela Lombardo, quiere que los niños que padecen cáncer puedan canalizar sus emociones a través de terapias lúdicas y se preocupen únicamente por lo que más les gusta: Jugar.
Daniela Lombardo, que en 2008 fundó Cassava Roots junto a su hermano Patricio, es ahora su presidenta, un viaje que comenzó cuando a su segundo hijo, Alexis, le diagnosticaron cáncer.
Y que continúa ahora, custodiando la inocencia de los más pequeños que, entre pruebas, pinchazos y horas y horas de espera, deben ser vistos y escuchados a través de un enfoque consciente de juego. Esta atención consigue alegrar sus corazones durante la dura batalla.
«A Alexis lo que más le gustaba de ir al hospital era recibir y abrir regalos, descubrir qué nuevos juguetes habían guardado para él», recuerda Daniela en entrevista con Marie Claire. Del recuerdo vivo siempre de Alexis, nació Fundación Cassava Roots y, con ella, la magia, el juego y la creatividad que transforman la realidad de los pequeños que combaten enfermedades oncológicas.
La misión Fundación Cassava Roots
A través de la adaptación de ludotecas hospitalarias, la distribución de regalos mediante el «Armario de Sorpresas» y la concienciación de los profesionales de la salud, es posible, reivindica convencida Daniela, sembrar sonrisas y calidez en medio de la adversidad.
«Queremos cuidar la salud emocional de los niños que padecen cáncer, brindar apoyo a los niños y sus familias durante este difícil trance. Que sigan jugando», explica.
El juego tiene muchísima importancia en el combate de enfermedades infantiles, pues, de acuerdo con la Dra. Paulina Pérez-Duarte Mendiola, pediatra clínica y antropóloga médica que ha centrado su trabajo en mejorar los resultados integrales de la salud de los niños.
Éste ayuda a los más pequeños a expresar sus sentimientos y preocupaciones de manera fácil y natural, lo que acelera su proceso de recuperación y favorece la comunicación con los profesionales de la salud.
Las perlas de tapioca de las bebidas que Cassava Roots vende en sus más de 75 sucursales de México, Estados Unidos y España son ahora más que una promesa de sabor, se han convertido en un símbolo de esperanza para los niños y sus familias que luchan cada día contra el cáncer.
Popotes orgánicos y vasos coloridos conviven en las unidades de esta cadena líder con camisetas y llaveros en los que aparece un changuito, el símbolo de Fundación Cassava Roots. El importe obtenido por la compra de cualquiera de estos objetos irá destinado a ayudar a cada vez más niños con cáncer, fomentando el juego en instalaciones hospitalarias.
Para obtener más información de Fundación Cassava Roots, sus programas y las formas de sumarte, visita su página Web, así como en Instagram. Además, puedes contribuir a la causa mediante transferencia o depósito a la cuenta BBVA: FUNDACION CASSAVA ROOTS AC No. cuenta: 0119951989 Clabe: 012180001199519898.
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