viernes, octubre 11, 2024
More

    ¿De verdad le debo decir todo a mi pareja?

    La respuesta corta es no, pero la larga nos lleva a pensar en las cosas que no quiere que sepa y en las que tú quieres saber de él

    Martina y Armando llevan casados 20 años, su relación es la envidia de todos sus amigos, quienes constantemente recurren a ellos para dudas con respecto al amor. En ocasiones, les preguntan cómo es posible que nunca los vean peleando, que siempre se vean felices, y que todo parezca marchar muy bien entre ellos.

    «No nos contamos todo y pasamos tiempo separados», dice Martina entre risas en una cena entre amigos, y Armando les comenta: «Se necesita cierto espacio para hacer tus propias cosas y tener la confianza de que esos momentos son tuyos, no para descansar de ella o de él, sino para hacer cosas que a ti te gustan y que tal vez al otro no».

    Armando es un gran fanático del cine, mientras que Martina lo es del teatro, así que han encontrado los espacios para hacer lo que les gusta, sin necesidad de estar juntos. Pero también hay cosas que no se dicen, que evitan comentar no para hacerle daño a alguien, sino para tener una vida propia, un lugar al qué recurrir ajeno a su pareja.

    «No tengo que saber quién le escribió a las 9 de la noche, él trabaja, puede ser cualquiera de su oficina, o un amigo del futbol, desafortunadamente como mujeres nos enseñaron que la confianza era brutal o no era, y desde ahí ya vamos lastimándonos y a nuestras parejas», me dice Martina Morales, quien además es terapeuta de parejas desde hace 25 años.

    Según ella, un ejercicio que podemos hacer para no sentir que se nos escapa la vida cuando nuestra pareja parece tener un secreto es llevar un diario de amor, en donde le escribamos a la persona las razones por la que queremos saber, por ejemplo, con quién comió el lunes en su trabajo. Una vez que releamos lo que pusimos, veremos que no es tan importante, y la siguiente vez no te clavarás tanto en estos detalles.

    ¿Qué dicen los expertos sobre esto?

    “Uno decide qué le apetece compartir y poner en común. Pero está claro que cualquier persona tiene aspectos íntimos que no comparte con nadie”, revela la sexóloga Susi Hidalgo en una entrevista reciente. “Al expresarte sin reservas a tu pareja corres el riesgo de perder cierto misterio, lo cual es la base esencial de la seducción”.

    Para la psicóloga Brenda López, en una relación amorosa debemos aprender a «gestionar la intimidad con el otro, respetando la individualidad. No podemos, por ejemplo, exigirle a una pareja que nos diga con cuántas personas ha tenido sexo en el pasado. No es algo que nos competa y no tiene ningún sentido hacerlo, lo único que encontrarás ahí será dolor».

    En cambio para la terapeuta Adriana Rodríguez, el contar todo no debe significar algo bueno o malo. «Todo dependerá de la relación que tengas, puedes contar todo o nada y seguir estando en ese nivel de confianza que se requiere para tener un amor fuerte y seguro. Incluso puedes contarte todo y terminar porque algo no te gustó que no se lavara los dientes o qué se yo».

    Sin duda el contarle todo a tu pareja puede evitar conflictos, pero también el no hacerlo. Lo que es primordial es que entiendas que lo más seguro es tener un diálogo en el que expreses tus razones para que te digan todo o para que no. Hablar siempre es la respuesta a todos los problemas de pareja, contarnos hasta qué tal estaba el metro a la hora pico, no tanto.

    Suscríbete a nuestro newsletter

    Recibe las mejores noticias y artículos de interés para ti.

    Otros artículos