Tania Ladeiro charló con la influencer en nuestro nuevo podcast Lado A Lado
Convertirte en una voz poderosa, pero que a la vez sea sensible y divertida no es tarea fácil, algo que Jimena Longoria conoce de primera mano. En nuestro nuevo podcast, Lado A Lado, dirigido por Tania Ladeiro, la influencer abre su corazón sobre su vida, lo que hace en sus redes sociales y muchas cosas más.
Fotografía: Sergio Valenzuela
Dirección: Gerard Angulo
Hair and Make up : Ana Uribe
Asistente de moda: Mary Lizbeth Pérez
Asistente de fotografía: Diego Bigolin
Pr. Talent industry
Además, la comunicadora nos platicó cómo fue que dio el salto de ser una conductora de radio a una voz que le habla a todos en social media, y por qué prefiere hacer reír a su audiencia que sumarse a otra ola de influencer que habla únicamente de sí mismos.
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Estudiaste en Monterrey, fuiste PR, y ahora influencer y comediante.
Yo estudié comunicación, me acuerdo que mi papá me preguntaba «¿qué quieres estudiar?», yo le decía que comunicación porque quería ser actriz, pero soy mala para actuar, por eso estudié comunicación. Me encantaba el radio, y empecé en un programa en Monterrey, y por loca vine a la Ciudad de México, le avisé a mi papá. No tenía ni la menor idea de lo que iba a pasar, pero encontré el trabajo de mis sueños, el ser publirelacionista, el estar en el medio, ver lo que pasa detrás. Me encantó dedicarme a eso, pero nunca me imagine que en un momento las cosas se iban a voltear, y ahora estar en frente. Me preguntan ¿cómo le haces?, pero no sé, todo se dio muy natural.
Esa transición nunca fue planeada, fue algo inesperado.
Simplemente tomé mi celular y empecé a grabarme, empecé a enseñar mi vida, mi familia, y la gente se empezó a identificar conmigo, porque creo que ser una persona real, una persona transparente son cosas que las personas notan, si estás actuando, o fingiendo, ellos lo notan. Yo me levanto y me grabo, no hago nada, simplemente te comparto lo que estoy viviendo en el momento.
Pero siempre lo haces con un poco de diversión, con risas, con esa vibra que tanto te caracteriza.
Hay personas que se confunden mucho, me dicen «eres una comediante muy exitosa», y yo les confieso que no sé contar un chiste, no me considero una comediante, soy una persona que se expresa de forma divertida, y ser comediante es un don, es un talento, el contar un chiste, el improvisar, si yo lo intento termino tensa, no se me da, lo que a mí me funcionó fue ser una persona real, y compartir sonrisas. Las risas son necesarias en el mundo.
Sí, claro, cuando vemos tu cuenta podemos ver contenido de risoterapia.
La verdad yo creo que la risa se contagia, las buenas vibras también, como también lo negativo. Yo siempre he dicho que ninguna persona en el mundo se levanta y dice «tengo ganas de ponerme de malas», ya hay muchas cosas en el mundo, entonces ya que no se sumen más.
Y qué haces con los haters que empiezan a decirte cosas sobre tu contenido.
No suelo darle importancia, a veces me dicen «¡qué feo color de uñas!», y pienso «¿qué te importa?». A veces me da risa, y otras, obviamente soy un ser humano y me agarran en mis cinco minutos, y contesto, como todos, pero trato de no hacerlo, porque sé que es más un reflejo de lo que ellos tienen
Si quieres escuchar el resto de la charla, aquí te dejamos nuestro primer podcast.
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