En un inesperado (o no) giro de eventos, los Skinny Jeans están en la primera etapa de un renacimiento. Después de varias temporadas en que se favorecieron siluetas acampanadas o construcciones utilitarias, regresan con fuerza y, para comprobarlo, solo necesitas voltear a uno de los looks más virales de esta temporada: el conjunto de chaqueta ajustada, jeans al tobillo y abrigo de faux fur en Miu Miu.
¿Qué nos dice esta tendencia? ¿Es algo bueno o malo? Esta no es una respuesta definitiva, considéralo una proposición.
La (infame) historia de los Skinny Jeans
Podríamos trazar una línea histórica de los pantalones ajustados desde los anglos (pueblo germánico de la antigüedad) o la aristocracia europea. Sin embargo, los pares más cercanos a lo que conocemos hoy en día comienzan a aparecer en los años 50, donde el Rock’n’Roll marcaba la contracultura. Los jeans cigarette, apodados así por su forma angosta y alargada, eran la pieza predilecta de rebeldes como James Dean o Elvis Presley.
Con las innovaciones tecnológicas, se introduce en los años 80 el uso de fibras elásticas para amoldar la tela al cuerpo. Esto resulta en una silueta más ceñida, pero que permite cierto grado de movilidad a las piernas.
Con la mezcla de la alta moda con la calle que se prolifera a principios del siglo XXI llegan nuevas formas de usar el denim. Tiros bajos, decoraciones, lavados de ácido y muchos logos. Todo esto en siluetas bootcut como en 7 For All Mankind, o bien entalladas.
Uno de los más grandes exponentes es Hedi Slimane, que bajo el liderazgo de Dior Homme, transforma la silueta masculina a un corte muy entallado, con castings de modelos muy delgados y andróginos.
En los 2010 se mantuvo esta silueta en tendencia, en buena medida por la influencia de los años 50 y 80 en muchas de las tendencias como mezclilla de colores, tops de peplum y camisetas holgadas para una vibra boho-chic.
¿Nos debería sorprender el regreso de los Skinny Jeans a las pasarelas?
La respuesta es sí y no. Sí porque es una evidencia más de cómo las tendencias se están moviendo a una velocidad más alta que de costumbre, lo que antes denominábamos ‘el ciclo de los 20 años’ ahora parece que se ha acortado a diez. (Hace unos meses te contamos sobre tendencias de los 2010 haciendo un comeback en la moda).
No, porque francamente la popularidad de los skinny jeans, aunque sí cayó en los últimos años, sigue siendo fuerte. En 2021, en Estados Unidos las ventas de este tipo de jeans representaron el 30% del mercado total, contra el 33% de jeans rectos, la primera vez en que no fue el corte más popular en 10 años, de acuerdo con Maria Rugolo, analista del Grupo NPD.
Prácticamente esta silueta llegó para quedarse, es atemporal y aunque no siempre la opción más cómoda, con el estilismo correcto puede hacer looks espectaculares.
Cómo usar Skinny Jeans en 2024
Piensa en los skinny jeans como un comodín. La bondad de esta silueta es que puede moldear el cuerpo y ajustarse a ti, por lo que el uso de volúmenes es un tema de balance. Muchas de las pasarelas de otoño 2024 y resort 2025 incorporan estas piezas de la mano de tops y capas más holgadas, o con mangas abullonadas para darle un contraste a la silueta severa.
Así como es el paso con cualquier par de pantalones de mezclilla, los jeans se pueden combinar para el día y la noche. Puedes comenzar con una camisa oversized con mangas abullonadas, un blazer con tenis, y para la noche cambiar el blazer por un top de joyería por debajo de la camisa, collares, brazaletes y aretes y un par de tacones strappy. No optes por zapatos demasiado cerrados o puedes crear incomodidad innecesaria.
¿Retomarás los skinny jeans, los dejarás en el olvido? O quizá, nunca los dejaste de amar. Así como el ciclo de tendencias se mueve, una vez más el péndulo vuelve a la dirección opuesta.
