Sobre la mirada masculinizada en los medios de comunicación, la migración a plataformas digitales, el feminismo y su compromiso con las mujeres…
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Por: Daniela España.
«Mujeres Trabajando» fue un programa original que le dio un espacio a las mujeres en la televisión que no existía en ese momento. Ya pasaron 20 años desde el nacimiento de ese proyecto, el cual marcó las pautas en los contenidos hechos por y para mujeres en la televisión mexicana. Muchas cosas han cambiado, pero otras no. Hablamos con la periodista, Adela Micha, quien protagoniza nuestra portada de marzo, sobre ese camino del que falta mucho por recorrer.
Han cambiado muchas cosas en los medios desde «Mujeres trabajando», se abrieron espacios y conversaciones gracias a ese programa. ¿Cómo fue el nacimiento del proyecto?
Nace como una necesidad personal al darme cuenta de la situación en la que estábamos las mujeres, con una urgencia de cambio y de equidad. Fue difícil primero convencer a quienes tomaban las decisiones en la empresa de que un programa así sería exitoso, y la verdad es que nadie me daba ni una semana de vida.
Yo tenía la concepción como muy clara de que quería una conversación entre iguales, entre quienes compartíamos las urgencias, las necesidades, las exigencias, pero era difícil de explicar pero finalmente me dieron la oportunidad de hacerlo.
Es un programa al que yo le tengo un cariño muy entrañable porque duró años y de estar en televisión por cable se fue a la televisión abierta. Me enseñó mucho porque conocí a mujeres increíbles, extraordinarias, muy excepcionales en todos sentidos.
La idea era juntarnos mujeres de distintas trincheras, de distintos quehaceres y hablar de los temas importantes. Por ahí desfilaron miles de mujeres, algo que yo llamaba mujeres gente como uno, como somos todas.
Hemos avanzado pero también creo que seguimos en un mundo con una mirada todavía muy masculinizada, ¿crees que se mantuvo el camino que tú abriste con ese programa?
Se empezaron a hacer programas de mujeres, pero con otra perspectiva. «Mujeres Trabajando» se trataba de hablar de los temas con conciencia y responsabilidad. Era entretenido porque esa era la idea. Creo que un programa de televisión tiene que ser entretenido para que pueda consumirse.
La fórmula funcionó muy bien porque no era un programa para mujeres, era un programa para todos, hablando desde esta problemática pero para todos. Y yo creo que abrió la puerta para que hubieran otros programas de mujeres, pero desde otra perspectiva, yo creo, no, yo creo que no se ha repetido la fórmula.
¿Después de llevar tantos años produciendo contenidos sientes algún tipo de responsabilidad que se haya acrecentado en los últimos años con las mujeres?
Siempre siento la responsabilidad, con cualquiera de mis espacios, con cualquiera de mis programas y de mis proyectos. Con las mujeres siento compromiso, porque lo que conocemos ahora como sororidad, era lo que yo quería lograr y demostrar, que sí éramos sororas, que sí podíamos hacer equipo, que sí podíamos hacer banda.
Y eso es lo que ahora llamamos sororidad. Siento mucho compromiso porque sigue habiendo deuda con las mujeres. Seguimos sin tener igualdad, siendo violentadas y discriminadas, siendo víctimas de palabras, frases, actitudes machistas y misóginas.
Siento un gran compromiso con las nuevas generaciones también, con mi hija, por ejemplo. Ellas ya lo conciben de una manera absolutamente distinta, y si yo en algún modo he dejado aunque sean rendijas me siento bien pagada. Es una causa que yo traigo hace muchos años. Soy feminista porque es necesario, pero no pertenezco a ningún grupo, de lo cual indagó en nuestra versión impresa.
Cómo fue la migración de los medios tradicionales a los medios digitales en este proceso de reinvención
Creo que La Saga empieza a consolidarse, creo que ya es un medio reconocido, y es un medio nativo digital, es decir, no viene de otro lado, nació en digital, y por eso creo que tenemos el lenguaje digital, que hemos ido aprendiendo a usar ese lenguaje, hemos aprendido a dirigirnos a distintas audiencias.
Me siento muy contenta porque hago lo que me gusta hacer en otras plataformas, pero finalmente lo que hago es lo que he hecho toda mi vida, que es comunicarme con la audiencia.
Amo entrevistar, lo he seguido haciendo, me encanta el arte de la conversación, que creo que hay que seguir insistiendo en rescatar el arte de la conversación. Estoy muy feliz con el proyecto, insisto, creo que empieza a consolidarse de alguna manera, la gente lo ubica, lo busca y le gusta.
¿Cuál sería para ti la evolución natural de La Saga o qué te gustaría, cómo piensas en ese proyecto en el futuro?
Lo pienso sin mí. Es una plataforma en donde yo quiero que sea un semillero de nuevos talentos, para ir descubriéndolos, entonces la veo próximamente sin mí. Claro que siempre voy a estar detrás mientras viva porque me encanta, porque es un proyecto mío que otra vez nació de la necesidad.
Lo veo como un canal digital para comunicarnos con la gente y que tenga siempre el sello de honestidad, de integridad, de apertura, de no ser excluyentes, que tenga esas características, que creo que son las características que yo he intentado tener y conservar a lo largo de más de 30 años de trayectoria.
Nos gustaría saber tu relación con otras disciplinas creativas, con la moda específicamente. Sabemos que tienes una relación cercana con ella y que te expresas a través de ésta
Yo siempre he dicho que no es tan frívola como de pronto se piensa, es un medio de expresión de lo que eres, de lo que sientes en determinado momento. De cómo te sientes, de cómo estás, de qué quieres proyectar, de cómo te quieres proyectar y de lo que proyectas en ese momento. Para mí es un medio de expresión creativa, sin duda.
Estoy en un momento de mi vida en el que me puedo dar ciertas licencias y no me interesa lo que las otras personas piensan. Cuesta trabajo llegar ahí, ¿sabes? Porque tenemos muchas ataduras sociales, culturales, muchos prototipos de lo que tiene que ser o de lo que no tiene que ser.
Y yo he logrado irme quitando todos estos atavismos sociales, culturales, lo que dicta la moda para determinada edad o no. También me gusta mucho la música, me gusta mucho el arte. Lo veo, lo observo y si puedo lo tengo, ¿no? La música pues también me pone en un estado de ánimo y proyecta mi estado de ánimo también.
¿Tienes en la cabeza ahora una entrevista pendiente que te gustaría hacer o que se te fue o que veas en el futuro, que estés trabajando por ella?
Lamentablemente, La Saga no es Televisa. Cuando tienes atrás a una televisora muy conocida a nivel internacional es más accesible poder lograr algunas entrevistas, pero yo siempre estoy tras la próxima entrevista.
Hay jefes de Estado y de gobierno que quiero entrevistar, que me parecen que son personajes sin los que no se puede entender este momento histórico. Pero también hay artistas, intelectuales, emprendedores que quiero entrevistar y que quiero conocer y que me generan curiosidad. La lista es grande y la estamos trabajando.
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