Nuestro sexto sentido de brujas se activa de vez en cuando, en especial cuando estamos en peligro. Por eso, debemos llevar con nosotras nuestros cuarzos de protección para alejarnos de las malas vibras y el mal de ojo. Aquí te explicamos cómo funcionan los cuarzos, cuáles necesitas y la importancia de recargarlos.
Antes de comprar o usar un cuarzo, es importante limpiarlo y activarlo, ya que en su uso diario pueden acumularse residuos de energía que, si no se eliminan, pueden generar efectos contrarios.
¿Qué es un cuarzo?
Un cuarzo es un mineral compuesto por silicio y oxígeno (explicación científica). En la espiritualidad, y según el Feng Shui, son conocidos como cristales o piedras sagradas que, de acuerdo con su color y origen, tienen propiedades curativas y protectoras. Actúan como un imán para atraer energía positiva y repeler la negativa.

¿Cuáles son los cuarzos de protección?
- Cuarzo rosa
- Cuarzo negro
- Citrino
- Cuarzo azul
- Ojo de tigre
- Cuarzo blanco
- Amatista
- Cuarzo rojo
- Selenita
¿Cómo funcionan los cuarzos?
Cuarzo rosa
Protege las relaciones y vínculos emocionales. Fortalece los lazos con las personas que amamos, como parejas sentimentales, amigos o familiares.
Obsidiana negra
Nos protege contra las malas intenciones de los demás y el mal de ojo. Actúa como un escudo contra ataques psíquicos, siendo el amuleto perfecto para ambientes laborales tóxicos o la convivencia con personas de energía pesada.
Cuarzo azul
Protege la salud, calma la mente y brinda serenidad. Coloca al usuario en un estado mental de tranquilidad que le ayudará a enfrentar situaciones estresantes.
Ojo de tigre
Proporciona protección contra la mala suerte y aleja energías negativas. Puede acompañarte en momentos estresantes en forma de collar, pulsera o guardado en la bolsa.
Cuarzo blanco
Crea un escudo de luz a nuestro alrededor, protege de pensamientos negativos y limpia los espacios de malas energías.
Amatista
De tonalidad morada, este mineral proporciona protección espiritual y emocional. Nos conecta con nuestra intuición y ayuda a reducir el estrés. Se recomienda tenerlo cerca de la almohada o usarlo antes de dormir.
¿Cómo escoger un cuarzo de protección?
Ahora que sabes cuáles son los cuarzos de protección, considera lo siguiente:
Piensa en las situaciones que más estrés te han causado, como la entrega de un trabajo, presentar un examen final, confrontar a una persona cercana sobre sus actitudes, asistir a un evento donde no conoces a nadie, o lidiar con una carga constante de ansiedad.
Según tus emociones, elige el cuarzo adecuado:
- Si despiertas abrumada cada día, la amatista es la mejor opción.
- Si vas a presentar un examen, el ojo de tigre te ayudará a evitar la mala suerte.
- Si acabas de iniciar una relación, el cuarzo rosa fortalecerá el vínculo.
Es importante seguir tu intuición, pero recuerda que un cuarzo no reemplaza la ayuda de un profesional de la salud. Estos cristales son complementos en el ámbito espiritual que pueden ayudarte energéticamente.

¿Cómo activar los cuarzos?
Existen varias formas de activar o limpiar los cuarzos. Estas son algunas de las más comunes:
Limpieza del cuarzo
Una de las formas más sencillas es limpiarlo con agua y sal o con incienso:
- Agua y sal: Sumerge el cuarzo en agua con sal durante 24 horas.
- Incienso: Pasa el cuarzo por el humo durante unos segundos para eliminar la energía residual.
Energía de la naturaleza
La naturaleza tiene muchas propiedades que ayudan a restaurar y limpiar los cristales:
- Enterrado en la tierra: Durante una luna llena o superluna.
- Luz solar: Déjalo bajo el sol durante varias horas para recargar y potenciar sus propiedades.
Meditación con el cuarzo
Meditar con el cuarzo también lo activa. Solo necesitas un espacio tranquilo y tomar el cristal entre tus manos mientras repites un mantra o afirmación. Visualiza lo que necesitas proteger y dale la intención.
