¿Recuerdas cuál era tu sueño cuando eras niña? Cuando solo tenía cuatro años, el de Frida era salir en la televisión, mientras agarraba el micrófono para cantar canciones de Bruno Mars, así lo recuerda en esta entrevista, en la que me permitió conocer su lado más profesional, pero también más inocente, audaz y soñador.
Originaria de Ciudad de México, Frida Sofía Cruz tiene solo 13 años, pero actualmente, su rostro ya es conocido a nivel nacional y también internacional gracias a su personaje como Manuel en la serie ‘El Secreto del Río’, llegando hasta esta edición en la que despedimos el 2024 (un año muy significativo para ella), pero también damos la bienvenida al 2025.
En una amena y divertida conversación, Frida me cuenta cómo comenzó el sueño, primero delante de la pantalla, lo cual siguió en la escuela de líderes, en la que se sintió cobijada y motivada a seguir sus metas; fue justamente ahí cuando conoció a la hija de su directora, quien era modelo. Ella recuerda verla llegar y decirle a su mamá: ‘Wow, yo quiero ser como ella’.
Fue así como relata: ‘Mis papás se acercaron con la directora y ella los asesoró, me llevaron a una agencia, me tomaron unas fotos e hice mi primer casting que fue para una marca de ropa de Estados Unidos’.
Entonces, descubrió la industria y supo que le gustaba, lo demás es una historia que ella misma está construyendo día a día con apoyo de su mamá, un pilar fundamental en su vida.
‘Me llevaba a los castings, ella siempre me dijo que ‘sí’ Nosotros no teníamos carro, teníamos que agarrar el transporte, fue un poco duro, pero mi mamá siempre me apoyó, me siento muy afortunada de eso’, menciona Frida, quien también estudió en el CEA Infantil.
El reto más grande para Frida
A su corta edad, Frida Sofía ya ha participado en dos producciones internacionales, por un lado, en la película ‘El Último Vagón’ de 2023, en la que compartió pantalla con Adriana Barraza, para luego, conocer el papel de su vida (hasta ahora) ‘El Secreto del Río’, la serie de Netflix en la que interpreta a un niño llamado Manuel.
Sobre este proyecto, sin pensarlo mucho, menciona: ‘Me ha marcado demasiado, es el reto más importante a mi corta edad y carrera, tengo 13 años y ha sido uno de los retos más importantes‘.
Recordando cómo llegó a ella esta oportunidad, señala: ‘Yo hice casting para un personaje, pero al director Ernesto Contreras se le ocurrió verme como Manuel. Entonces fui a hacer el casting, me pidieron gorra, pantalón de mezclilla, cabello amarrado’.
¿Cómo fue dar vida a Manuel?
Entre risas, se acuerda de haber pensado y bromeado: ‘Soy Manuel y soy un niño’, para después recibir aquella llamada en la que le avisaron que se había quedado con el papel, luego tuvo un zoom con la casa productora para hablar sobre la caracterización y tomar la decisión si el personaje usaría peluca, gorra o tendría que cortarse el pelo, esta última opción fue la que se quedó.
‘Llegamos a la conclusión que lo mejor para el personaje de Manuel, era cortar el cabello y estuvimos de acuerdo’, expresa. Para ella, uno de los mayores retos que aceptó sin miedo, además, señala: ‘Me empezaron a enseñar muchas actrices que se habían tenido que cortar el pelo, una que se quitó los dientes para hacer un personaje de abuelita…’, incluyendo ejemplos como el de Millie Bobbie Brown.
La caracterización fue un aspecto importante para su personaje, pero aunado a ello, también recuerda: ‘Para la preparación, antes de las grabaciones tuve una coach con la que practicábamos las escenas porque luego unas escenas que eran como de mucho llorar y nos teníamos que preparar antes‘.
Así, con mucha madurez de por medio, Frida me comparte: ‘El hecho de hacer un personaje de niño ya era un reto, pero esa es la magia de los actores, si tengo que engordar, enflacar, si tengo que cortarme el cabello, siempre voy a decir que ‘sí’ porque es lo que me gusta hacer, crear otro personaje, y esa es la magia de los actores’.
Aprendizajes y aventuras en el set
‘El Secreto del Río’ es una serie que aborda muchos temas relevantes para la sociedad, desde la cultura hasta los valores, visualiza a la comunicad LGBTQ+ y profundiza en la amistad.
Un concepto que para Frida significa ‘alguien en quien puedas confiar algo que tal vez a tus papás no se lo puedas contar, pero quizás a un amigo muy cercano sí. Con quien puedes platicar, contarle tus secretos, hablar, reír, llorar, después de tanto tiempo, no importa nada, solo la amistad’.
Algo que reafirmó en el set con Mauro (Erick) y Lisa (Paulina), con quien conformaba el cast infantil de la serie, y quienes se convirtieron en sus compañeros de pantalla, pero también de aventuras. ‘Con Mauro, había escenas en las que nos teníamos que reír y nos reíamos de verdad, había escenas en las que sí teníamos que llorar y los dos nos apoyábamos’, expresa.
Mientras que ‘con Lisa también tuve escenas muy bonitas, de hecho, tuve más interacción con ella que con Mauro porque somos niñas y a veces nos íbamos a la alberca y así’, recuerda.
Además de la linda experiencia de coincidir con Trinidad González (Sicarú), su personaje de grande: ‘Yo quiero mucho a Trini, es una persona increíble, cuando la conocí me quedé como ‘wow’, comparamos fotos de chiquitas y nos parecemos demasiado. Me buscaron de grande’.
¿Con qué se queda Frida de la serie? ‘Me deja demasiadas cosas como las locaciones, la cultura de Oaxaca, yo no conocía Oaxaca, me deja todas esas noches en la alberca con Lisa y con Mauro, me deja las playas, en las que nos la pasábamos cada fin de semana, me llevó todo, la gente de Oaxaca es un amor, me llevó todo eso’.
Lo cual agradece infinitamente: ‘Todo ese trabajo no se hubiera logrado sin los directores, sin mi agencia, sin mi escuela, sin mi mamá que siempre dijo que ‘sí’, estoy agradecida con todos. Me fui tres meses a Oaxaca y la escuela me apoyó demasiado con ese tema’.
Los sueños que se cumplen
Frida tiene solo 13 años, pero eso no es impedimento para que construya sus sueños, porque como ella misma me dice: ‘Me divierto mucho con los rodajes, es algo que no voy a dejar de hacer con mucha disciplina’. En un futuro, me confiesa que también le gustaría estudiar Pedagogía porque le gustan mucho los niños chiquitos, y claramente, seguir con la actuación, ‘lo que me gusta hacer’, remarca.
Es por eso que entre sus planes está ‘seguir preparándome, también estudiar inglés para hacer proyectos en otro país como Estados Unidos y en muchos países, también estoy tomando un curso de actuación para seguirme preparando’.
Cuando le pregunto cómo se sintió en este shooting, su respuesta fue encantadora y sincera: ‘Me encantó la ropa, el equipo me cayó súper bien, le robé sus tips de maquillaje a la maquillista, me estoy comprando las cremas que me recomendó’.
Y al querer saber qué es eso que le diría a los niños que como ella quieren salir a la tele, expresa: ‘Yo ocupo los 10 hábitos de la gente altamente efectiva, que es siempre tener un fin en la mente, yo desde los cuatro años tuve el sueño de que quería hacer esto, tengan un fin en mente y sepan qué quieren hacer y quienes quieren ser’.
Además de ‘hacer sinergia, yo hago sinergia con mi mamá, somos un equipo de dos personas y siempre nos estamos apoyando. Siempre hagan equipo, yo hice equipo con mi agencia, escuela, casa productora. Y aunque pasa el tiempo y vean que no avanzan, que no les mandan castings o no han salido en nada, nunca se rindan, así yo empecé’.
Añade: ‘Un año estuve sin hacer nada y estaba súper deprimida, mi mamá que dijo que no me preocupara que iba a llegar algo muy pronto, siempre sigan sus sueños y nunca se rindan’.
Más allá de su brillante interpretación de Manuel en ‘El Secreto del Río’, Frida Cruz revela su esencia auténtica: una niña centrada que navega entre el pop y los corridos —estos últimos, banda sonora inolvidable de sus días de rodaje junto a Mauro—. Mientras descubre nuevos mundos a través de series como Gossip Girl y se sumerge en el universo de la Saga Crepúsculo.
Ella sueña con colaborar con gigantes de la industria como Guillermo del Toro y Eugenio Derbez, además de reencontrarse con Adriana Barraza. Su sonrisa radiante y personalidad magnética no solo iluminan la pantalla, sino que auguran un futuro prometedor para esta estrella en ascenso que, a sus trece años, ya ha comenzado a escribir su propia historia.
Créditos:
Fotografía: Bryan Flores
Realización: Sergio Valenzuela
MUAH: Ana Eva Trinidad
Asistente de fotografía: Eugenio Vargaci
Asistentes de moda: Vanessa López y Samantha Terrones
Producción: Yuliet Delgado