Sabato de Sarno encuentra el amor en la moda, creando en Gucci un lenguaje que susurra sus encantos.
Un abrigo que te abraza como un amante. Así es como Sabato de Sarno imagina el universo Gucci que construye paso a paso. A través de gestos considerados transforma eso que damos por sentado para crear algo extraordinario.
Esta nueva era es como una espiral que regresa a su centro para luego expandirse. De nueva cuenta, nos encontramos fuera del Gucci Hub, en la Fonderia Carlo Macchi, con poco más que una plataforma alzada el público a su alrededor. Una sobriedad industrial que sirve de escenario para una propuesta sutilmente cálida.
Así como su debut abrió con un abrigo, esta vez Sabato se gira completamente en torno a esta prenda. Su confección, un acto artesanal, una labor de amor. Él se concentra obsesivamente en su construcción, la forma en que cae en el cuerpo, como cambia de color según la luz.
Creación y recreación de patrones clásicos
No hay una inspiración obvia aquí. El motivante es el estudio de la construcción, la tarea de un patronista y un diseñador con visiones precisas. Una pieza que hace muestra de esto es un abrigo corto ligeramente más largo de atrás y construido de tal forma que no hay costuras que unan al cuerpo con la manga y, a pesar de esto las mangas están perfectamente ajustadas.
Esta pasión por el abrigo se traduce en otras piezas como chaquetas bomber con volúmenes amplios y vestidos que combinan lana con encaje y terciopelo. Sin embargo, no todo es un estudio de siluetas. El impecable gusto y técnicas del atelier de Gucci quedan manifiestas en vestidos de encaje cuya feminidad complementan el toque masculino de la sastrería. Por primera vez introduce un gráfico, se trata de un patrón de garzas que se repite en jacquards metálicos. Las lentejuelas y cristales forman cascadas que bailan en cada paso.
Los accesorios de esta temporada evocan detalles inspirados en el mundo ecuestre. Un nuevo bolso en forma de media luna se inspira en un diseño del archivo de la casa italiana. El bambú regresa en una bolsa bucket y un clutch adornado con una barra de metal en tono dorado. Los zapatos son arquetipos renovados. Stilletos e color Rojo Ancora, verde o negro se decoran con tiras de cristales, las botas de equitación suben encima de la rodilla y el mocasín horsebit se transforma con tacones y plataformas altas.
El toque final es un collar de archivo en oro galvanizado con un motivo de tachuelas con un una cinta que va a juego con cada atuendo, un último gesto de romance.
Bailando por las noches entre calor humano y amor
Mark Ronson (el productor de Barbie The Album) estuvo a cargo de nueva cuenta del soundtrack, comenzando con el melancólico Coronacid de Did Virgo y Morgan K. Acto seguido Kelsey Lu hipntoiza con su cover de I’m Not In Love, una canción sobre alguien que esconde sus verdaderos sentimientos ante alguien que le obsesiona. Al final The Irrepressibles ofrece el climax con Two Men In Love, un himno de amor sin pena ni vergüenza.
En una carta Sabato de Sarno escribió: «Mis sueños, como ocurre con mi moda, siempre dialogan con la realidad. Porque no busco otro mundo donde vivir, sino formas de vivir en este mundo«.
Soñar en tiempos inciertos y caóticos requiere valentía. Sabato lleva su corazón no precisamente debajo de la manga, en cada ensamble más bien.
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