En la ciudad de los sueños hay un hotel que los protege en sus habitaciones.
No hay nada que se compare con Nueva York, la selva de concreto que se ha ganado la fama de ser una de las ciudades más emblemáticas del mundo, con su historia, calles y monumentos.
Es el punto de encuentro donde el glamour neoyorquino se fusiona con el confort del descanso y donde se levanta el hotel por excelencia: The Ritz-Carlton New York.
¿Dónde se encuentra The Ritz-Carlton New York?
La ubicación es en sí una atracción, a solo unos pasos del parque y paisaje más famoso: Central Park, el corazón de la ciudad. Cerca de Fifth Avenue, Times Square y Broadway, el epicentro de la cultura y el entretenimiento están a la vuelta del hospedaje más impactante.
Posicionado en un lugar de alto lujo, acerca a los huéspedes a lo mejor de la ciudad y propicia una experiencia de primera mano al presentar la cotidianidad de los habitantes a solo una puerta de distancia.
Arte y vanguardia en el interior
En el interior de este magnífico hotel hay habitaciones diseñadas para ofrecer una esencia de elegancia contemporánea con vistas de ensueño y arte icónico que se fusionan con las amenidades, haciendo que se sienta como un hogar fuera de casa.
Las suites toman elementos de la historia de Nueva York con toques ligeros franceses para recrear la estética de casas campestres en un mundo actual y tecnológico, con arte expandido por los tapices y con las vistas más exclusivas hacia la avenida y tres secciones del parque.
Habitaciones legendarias y con legado
Dentro de la exclusividad se encuentra lo privilegiado. En las Legendary Suites encontramos lo atrevido, con detalles elaborados en madera, colores reconfortantes, privacidad y un diseño moderno de un penthouse en Manhattan.
Por otro lado, en las Legacy Suites nos da la bienvenida lo tradicional, con una vista panorámica bañada en mármol y con una paleta de dorados y beige.
Una experiencia de alta calidad
Más allá del lugar donde descansamos, otro de los atractivos del hotel es su clásico salón, donde las reuniones están envueltas por cócteles artesanales y deliciosos platillos a base de ingredientes locales, creando un momento íntimo de conversación y capturando el humor de conexión y relajación.
El nuevo salón ofrece un servicio personalizado disponible solo para los huéspedes del Club Lounge, permitiéndoles entrar en el oasis que ha construido The Ritz-Carlton New York.
El hogar del bienestar
Porque además de caminar, conocer y degustar, lo que uno busca es un tiempo de bienestar para la mente y el cuerpo, entre las paredes del hotel se ubica el spa La Prairie de Suiza, que ofrece su único retiro de spa en el noreste en The Ritz-Carlton New York.
Cuenta con distintos tipos de tratamientos para poder encontrar la fuente de la juventud y la tranquilidad, con seis cuartos especializados divididos para hombres y mujeres, con áreas de vapor y un salón de relajación.
Para el cuerpo, se ha habilitado un centro fitness que cuenta con la más alta tecnología y equipamiento, permitiendo a los invitados mantenerse en forma mientras están en constante movimiento. Con actividades para los que les gusta salir al aire libre y un estudio destinado a mejorar la sensación del ejercicio.
Cultura en cada rincón
Y como no se puede estar en Nueva York sin conocer el arte, a través de sus paredes y pasillos nos llevan por medio de una cápsula del tiempo con piezas y fotografías de ediciones limitadas otorgadas por artistas de diferentes generaciones y de gran renombre, desde Rodney Smith hasta Gordon Parks. Se puede sentir la influencia de la tradición en cada una de sus amenidades.
Es una prioridad que cuando se visite la ciudad de las luces, el lugar que nos reciba debe envolver todas sus características en un solo hotel. Es por eso que The Ritz-Carlton New York es la mejor opción para aquellos que les gusta viajar con exclusividad.
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