Si eres una apasionada de la moda, seguro que El Diablo Viste a la Moda no es solo una película más en tu lista, sino un verdadero clásico de culto. Estrenada en 2006, esta historia atrapó al mundo con su mezcla perfecta de estilo, drama y humor ácido, y nos regaló a Miranda Priestly, una mujer cuyo nombre se pronuncia con respeto — y un poco de miedo.
Sus frases no solo definieron una época, sino que se convirtieron en mantras para quienes vivimos y respiramos moda. Miranda Priestly nos enseñó que en el mundo de la moda, cada palabra pesa, cada gesto importa y que el estilo va mucho más allá de la ropa.
Las mejores frases de El Diablo Viste a la Moda
- ¿Estas cosas? Oh, entiendo. TÚ crees que esto no tiene nada que ver contigo… Pero lo que no sabes es que ese jersey no es sólo azul, no es turquesa, ni es marino, en realidad es cerúleo…— Miranda Priestly
- ¿Flores? ¿Para primavera? ¡Qué original!— Miranda Priestly
- Mi vida personal pende de un hilo. — Andy Sachs
- Eso es lo que pasa cuando empiezas a rendir, cielo. Avísame cuando tu vida esté destrozada. Será hora de un ascenso. — Nigel
- Todo el mundo quiere esto, todo el mundo quiere ser nosotras. — Miranda Priestly
- Vendiste tu alma el día que te pusiste aquellos Jimmy Choo. — Emily Charlton
- Por favor, aburre a alguien más con tus preguntas. — Miranda Priestly
- No tienes ni estilo, ni gusto para vestir. — Miranda Priestly
- ¿Podría deletrear Gabbana? — Andy Sachs
- Me niego a estar mal, me pondré un Valentino. ¡Por el amor de Dios! — Andy Sachs
- Sigo la dieta de no comer nada y, cuando estoy a punto de desmayarme, me como un quesito. — Emily Charlton
- Sigo siendo la misma persona de antes, solo que con ropa mejor. — Andy Sachs
- Un millón de chicas matarían por este puesto.
¿Qué frase famosa dice Miranda Priestly?
Una de las frases más emblemáticas y poderosas que pronuncia Miranda Priestly es “Todo el mundo quiere esto, todo el mundo quiere ser nosotras.”
Con esta línea, Miranda no solo revela la envidia y admiración que genera su posición en el mundo de la moda, sino que también refleja la exclusividad y el poder que conlleva estar en la cima de una industria tan exigente y glamorosa como la suya. Es un recordatorio elegante y contundente de que el éxito, por duro que sea, es un privilegio codiciado por muchos.
El Diablo Viste a la Moda no es solo una película, es un ícono que trasciende el tiempo, la moda y el cine. Sus frases, afiladas y memorables, siguen resonando porque capturan la esencia misma del poder, la ambición y el estilo con una elegancia brutal.
Porque en este universo, como bien sabe Miranda Priestly, la moda no es solo lo que llevas puesto, sino cómo caminas, hablas y te impones al mundo. Y eso, sin duda, nunca pasará de moda.