El péndulo del menswear esta moviéndose hacia otra dirección, donde predomina una elegancia clásica
Hace un par de años Virgil Abloh profetizó que el streetwear murió. No por nada sus colecciones en Louis Vuitton y Off-White comenzaron a tener un enfoque más hacia una línea sartorial de un par de años para acá. Amiri, la marca californiana conocida principalmente por sus jeans se presentó en París sin una sola pieza de mezclilla a la vista. Las colecciones de menswear de la Semanas de la Moda ya confirmaron que ahora estamos volviendo hacia la elegancia.
Aunque pareciera un retorno a las convenciones, en realidad así es como ahora se encuentran las próximas obsesiones de aquellos trendsetters que subvierten las expectativas. Cuando todos visten de jeans y hoodies, nada te diferencia como el esfuerzo de ponerte una corbata que haga juego con tu blazer.
El traje ahora se ve transformado desde las versiones más clásicas, con pantalones ajustados que están a un grado de separación de los skinny que creíamos haber dejado en el pasado, hasta en configuraciones tan relajadas que parecen loungewear. Los accesorios de rigor son guantes de cuero, cortos o largos, y corbatas.
Expresiones masculinas en transformación
Otra de las propuestas de la temporada fue la cuasi-falda, skorts o bermudas que parecen faldas. Años atrás sería impensable ver esto más allá de una propuesta simplemente para el desfile. Ahora aparecen de forma tan natural en las pasarelas, que podría significar una mayor abertura a las distintas expresiones de la masculinidad.
Este retorno a lo clásico nos recuerda un poco a nuestros abuelos, que inspiran el grandpacore, una tendencia que apunta a adoptar una forma más casual, cómoda de vestir con tonos neutros.
Sin embargo, la influencia de los años 2000 no parece detenerse. Los efectos desgastados y el layering fueron otra tendencia. Es curioso notar como, si antes repudiábamos la combinación de dos playeras polo, ahora Billie Eilish ya adoptó el look y ahora también algunos diseñadores optan por crear capas dobles de sus piezas como en Givenchy o Botter.
La Semana de la Moda de menswear presentó esta vez algunas de las colecciones más inspiradoras y disruptivas que hemos visto en algunas temporadas. Lo irónico es que la innovación ahora se encuentra en aquello que solo era una memoria.
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