Me pregunté ¿Y si esta vez no necesitábamos huir a una isla tropical para sentirnos radiantes, jugosas y descansadas? ¿Y si bastaba con un poco de blush coral, gloss y actitud?
Este verano no se trata de perfección ni de contouring estratégico. Se trata de brillar sin esfuerzo, como si el sol te hubiera besado la piel y tu día empezara con un smoothie de guayaba. Es oficial: la Guava Girl ha llegado para destronar a la clean girl y a todas sus primas minimalistas. Y sí, trae consigo el glow más apetecible del verano.
Prepárate para enamorarte de una estética que huele a fruta tropical, se siente como vacaciones y se ve como el filtro más bonito de tu carrete.
¿Quién es la Guava Girl y por qué todas quieren ser ella?
La Guava Girl es esa chica que parece vivir en un sunset reel permanente. Su mood es zen pero divertido. Hace pilates al amanecer, se broncea al natural, toma smoothies de frutas y jamás se olvida del SPF.
No fuerza su look: lo respira. Se viste con tonos melón, vestidos fluidos, accesorios dorados y sandalias con flor en 3D. Su maquillaje tiene algo de Barbiecore, pero con la frescura del tono coral.Es la versión 2025 de la That Girl, pero en modo tropical.
¿De qué va exactamente el guava makeup?
La respuesta corta: de parecer que acabas de volver de unas vacaciones en una isla. La respuesta larga: una rutina de maquillaje monocromática donde el coral-rosado —llámalo guava pink— es protagonista absoluto.
Olvida el acabado mate. Aquí todo es glowy, juicy, sunkissed. La piel respira. El blush se nota. El gloss brilla. El resultado es tan apetecible como un cóctel servido en la playa al atardecer.
¿Cómo se prepara la piel al estilo guava girl?
Todo empieza con una piel hidratada como si llevara horas en un spa frente al mar. La clave es una rutina previa minimalista pero efectiva: sérum, contorno, hidratante ligera y protector solar (si tiene glow, mejor).
La base es opcional. Un skin tint o protector solar con color basta para emparejar el tono sin borrar tus pecas ni tu textura real. El corrector solo va donde lo necesitas y los polvos… si acaso en la zona T. La idea es simple: menos cobertura, más luminosidad.
¿Dónde está el corazón del look? Spoiler: en las mejillas
El blush es todo. Se aplica como si el sol te hubiese besado la cara: en las mejillas, en el puente de la nariz, incluso en párpados. En crema primero —guayaba, melocotón, coral— y luego, si quieres más intensidad, sella con uno en polvo del mismo tono.
El blush blindness (síndrome de no saber cuándo parar) aquí no es un error, es una filosofía.
¿Y los labios? Juicy, por supuesto
Gloss, gloss y más gloss. El labio guava es brillante, húmedo, ligeramente pigmentado. Primero perfilas con un lápiz suave —rosa, coral o nude melocotón— y luego aplicas un bálsamo con color, un lip oil o ese gloss que hace que tu boca parezca recién mordida.
¿El truco? Aplicar un toque de iluminador en el arco de cupido para que el resultado sea aún más fresco.
¿Qué productos se están volviendo virales por su estética guava?
Basta con mirar en TikTok para entender que las marcas han captado el mood tropical. Glow Recipe lleva tiempo apostando por la guayaba en sus fórmulas. Summer Fridays lanzó un bálsamo llamado Pink Guava y Rhode tiene su colorete Sprinkle, de tono guayaba intenso.
Incluso Huda Beauty lanzó su blush Intense Guava y todos están agotándose. El mensaje está claro: el color de la temporada no es el butter yellow, ni el melon nails. Es el guava pink.
¿Qué diferencia hay con otras tendencias virales como el strawberry girl o el tomato makeup?
Buena pregunta. Si el tomato girl makeup es más rojizo y el strawberry look más dulce e inocente, el guava makeup es su versión relajada, cálida y sensual. Tiene la sutileza del melocotón y la energía del coral.
Es el punto exacto entre me arreglé poquito y me veo de portada. Una estética pensada para quienes aman verse naturales, pero saben que un buen blush puede cambiar el día.
¿Es solo maquillaje o también una forma de vivir?
Como muchas tendencias de belleza recientes, la estética Guava Girl va más allá del maquillaje. Es una forma de celebrar el verano, de conectar con una versión tuya más ligera, más de disfrute. Es cuidarse sin obsesionarse. Es ponerse gloss para ir por un café. Es hacer skincare con música chill de fondo. Es elegir colores que te hagan sentir feliz.
El maquillaje más apetecible del verano no requiere horas frente al espejo ni técnicas pro. Solo necesitas hidratación, color guayaba y ganas de sentirte cute sin complicarte.
