Sydney Sweeney y Álvaro Morte nos hacen temblar con «Inmaculada»

Una película de terror que nos hace pensar si estamos siguiendo un llamado o tomando una decisión.

Por: Luis Tellez.

«Inmaculada» es el nuevo y terrorífico proyecto en el que Sydney Sweeney da vida a Cecilia, una fiel y devota monja que deja Estados Unidos para dar el siguiente paso en su camino espiritual en un convento italiano.

Lo que prometía ser un nuevo comienzo en su práctica de fe, de pronto se transforma en una oscura y estremecedora pesadilla en la que, conforme explora los pasillos y los rincones ocultos del convento, se ve envuelta en prácticas siniestras, secretos perversos y horrores amenazadores que ponen en duda su veneración a la Iglesia católica. 

No spoilearemos nada, pero pudimos platicar con la actriz y también productora de esta película, y con su co-estrella, Álvaro Morte, a quien seguro recordarán por su personaje de «El Profesor» en la exitosa serie española, «La Casa de Papel». Nos platicaron cómo fue trabajar juntos, cómo fue saltar al género de terror y por supuesto, por qué dijeron que sí a esta espeluznante historia. 

Detrás de «Inmaculada»

«Fue una auténtica maravilla hacerlo. El equipo en Italia es absolutamente increíble. Todo nuestro elenco fue un encanto. Todos se presentaron con ganas de trabajar y todos queríamos estar juntos, filmar y hacer este proyecto».

«Siempre se agradece tener un grupo de personas que sienten la misma pasión por lo que estás haciendo», dijo Sydney. También admite que le encantó trabajar con Álvaro. A pesar de ser una película de terror, en el rodaje se reían y divertían todo el tiempo, a tal grado que según ella, podría haber sido una comedia perfecta. 

Álvaro, por su parte, revela que además de aceptar participar después de leer y quedar fascinado con el guión, fue Sydney quien le pidió interpretar al padre Tedeschi después de conocerse personalmente en una gala. Además, comenta que para él, fue un verdadero placer filmar en Italia: «Para mí, al ser español, filmar en un país mediterráneo, me hizo sentir muy conectado«.

¿Un llamado o una decisión?

Al principio de la trama, a su llegada a la bellísima Italia, Sorella Cecilia es cuestionada por un par de agentes aduaneros sobre su decisión de volverse monja pues, en sus palabras, «es muy atractiva y un desperdicio».

A ello responde, tajante y un tanto ofendida, que no ve su oficio como una decisión… lo que nos hace inferir que más bien lo ve como un llamado, como una vocación. Una afirmación que nos lleva a preguntarles si asimilan su carrera como un llamado o una decisión. «¡Oh, wow. que buena pregunta!», exclaman al mismo tiempo. 

«Me preguntan mucho cuál fue ese momento en el que dije: ‘Voy a ser actriz’, pero la realidad es que es algo que siempre ha sido parte de mí«. Si bien no hubo una película que la hiciera decir, ‘Oh, esa es mi futura carrera’ algo dentro de Sydney le afirmaba que esa sería su profesión.

«Al principio ni siquiera entendía, porque era muy joven. Tenía como ocho años cuando les dije a mis padres que quería ser actriz, pero no sabía lo que eso implicaba ni lo que significaba, solo sabía que se trataba de interpretar personajes. Entonces creo que es algo innato. También hay una toma de decisión involucrada, pero simplemente estuvo ahí, siempre lo supe».

El caso de Álvaro es un tanto parecido. «Yo estaba estudiando Ingeniería en Telecomunicaciones. Nunca tuve ninguna conexión con la actuación en mi vida. Pero un día, no sé por qué, fui a una audición para un cortometraje y me llamaron. Y entonces quedé completamente enganchado. Dejé la Ingeniería«.

Recapitulando su pasado personal, recuerda que de niño, mientras miraba un programa de televisión en su mente nació un pensamiento «¡Wow, me encantaría hacer eso!». Sin embargo, al crecer en un pequeño pueblo al sur de España en aquella época, el simple pensamiento o la mera admisión de querer seguir ese camino era considerado algo completamente inusual y extraño.

Por ende, de manera inconsciente, reprimió esos deseos hasta años más tarde, cuando finalmente tuvo la oportunidad de explotar esa idea al ser aceptado en la audición.

¿Creen en los milagros?

Para rematar la conversación, cuestionamos si creen en los milagros, y de ser así, cuál les gustaría que se hiciera realidad. «Creo que es bonito creer en los milagros, pero no estoy seguro si creo en ellos o no. Ni tampoco si debería conectarlos con algo dentro del universo de la religión».

«Pero creo que sería un milagro si pudiéramos detener cualquier conflicto que hoy existe en el mundo. No es necesario especificar alguno de ellos, pero si eso sucediera, entonces creería en Dios«, manifiesta Álvaro. 

«Creo que lo que dijo Álvaro es bastante acertado. Siempre he creído que en todo lo que sucede tiene que haber un trabajo duro por detrás. No creo en el azar y la suerte de las cosas. Sería hermoso si fueran reales. Pero no sé si realmente creo en los milagros», concluye Sydney. 

Si quieres saber más sobre la aterradora historia de «Inmaculada», puedes verla en cines a partir del 30 de mayo de 2024.

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