9 frases comunes en personas con resiliencia emocional

Una vida con mayor seguridad e independencia se logra por medio de la resiliencia emocional, un estado mental para los más exitosos.

Seguro has escuchado hablar de la inteligencia emocional y su papel fundamental en nuestras vidas. Pero hay otro término que no debemos ignorar, conocido como resiliencia emocional. Una cualidad muy valorada que nos puede ayudar a enfrentar los malos momentos y cambiará para siempre la manera en como vemos la vida.

La película Intensamente nos enseñó muchas cosas, pero pasó por alto el tema de la resiliencia. En nuestra cabeza, las emociones buscan gobernar en cada oportunidad, rompiendo con la calma y tranquilidad, dándole espacio a pensamientos intrusivos que afectan cómo nos desarrollamos con los demás.

¿Qué es la resiliencia emocional?

La resiliencia emocional es un concepto que, pese a no ser demasiado popular, es en realidad crucial para nuestro día a día. La RAE define la ‘resiliencia´ como la ‘capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos’.

Según la American Psychological Association (APA) es «el proceso de adaptarse bien a la adversidad, a un trauma, tragedia, amenaza, o fuentes de tensión significativas, como problemas familiares o de relaciones personales, problemas serios de salud o situaciones estresantes del trabajo o financieras».  

En este contexto, sabemos que nuestros pensamientos dan paso a las creencias y, cuando somos amables con nosotros mismos, podemos cambiar la manera en que enfrentamos la vida. En cada oportunidad que tengas, en las mañana frente al espejo, antes de entrar a una junta, o en las noches antes de acostarte, ten en mente estas frases de resiliencia emocional.

Puedo superar esto

La mente es más poderosa de lo que creemos. El pensar que tenemos la capacidad ayuda a que realmente podamos cambiar nuestra percepción. La actitud hace mucho y en función de cuál adoptemos enfrentaremos los problemas de una forma u otra. 

No voy a convertirme en una víctima

El victimismo, sea con motivo o no, es una emoción por la que es muy fácil dejarse llevar porque nos da comodidad. Es muy fácil lamentarse y señalar a los demás para no tomar responsabilidad. Muchas veces no podremos hacer nada porque las cosas que nos ocupan están fuera de nuestro control, pero otras sí tendremos voz o voto. La clave es cambiar de la perspectiva de ‘soy una víctima y no puedo hacer nada para mejorar las cosas’ a “¿cómo puedo crecer a partir de esto?”.

La vida es dura

No nos hacen falta pruebas para saber que la vida no es de color rosa. No podemos evitar los momentos malos y ante todo tenemos que levantarnos con seguridad.

Esto también va a pasar

Otro pensamiento que ayuda a aceptar las cosas es el ser conscientes de que todo es temporal. Todo llega y todo pasa. Puede que en el momento presente veamos algo como el fin del mundo, pero lo más probable es que no lo sea. 

¿Qué puedo aprender de esto?

Dejando atrás el victimismo y tomando control de nuestra vida. Cuando cambiamos la pregunta ¿Por qué me está pasando esto?, por ¿Qué puedo aprender de esto? Encontramos soluciones rápidas y claras haciendo el esfuerzo de analizar lo que nos pasa.

Necesito un tiempo

A veces está bien parar un momento, tomar aire, y después del tiempo necesario volver. El ‘desconectar para conectar’. Pedir ayuda o dejar responsabilidades no es señal de debilidad, sino de amor propio e inteligencia emocional. 

Todavía tengo cosas por las que estar agradecida

La gratitud es una de las claves de la vida. Se ha comprobado que cuando iniciamos el día con una mente positiva, todo a nuestros alrededores mejora.

Es lo que es

Aceptar las cosas como son, sin intentar adornarlas, ni para bien ni para mal, es necesario para avanzar. Recordar que no podemos cambiar el pasado y solo tenemos el presente nos ayuda a planificar el futuro de una mejor manera.

Voy a soltar esto

Dejar ir, sea una persona, una situación o un hábito, es muy importante porque nos ayuda a avanzar. Cortar lazos afectivos o salir de una relación codependiente puede parecer imposible, pero una vez del otro lado el panorama mejora.

Ahora lo sabes, una mente positiva es el arma secreta contra un mal día. La manera en como nos hablamos influye en nuestras actividades. No se nace con resiliencia emocional, se desarrolla.

Texto original: Lucía Gavela
Traducción: Bianca Cosulich
Artículo originalmente publicado por Marie Claire España