Si en tu juventud llevabas un diario, entonces la técnica del journaling no te resultará ajena. Por medio de la escritura expresamos nuestros más grandes deseos, y cuando se combina con herramientas de manifestación y meditación, lo que soñamos puede hacerse realidad. Te contamos más sobre el journaling, cómo funciona y cómo puedes empezar el tuyo.
¿Qué es el journaling?
El journaling es la práctica de escribir (o dibujar) pensamientos, sentimientos y experiencias, como un diario. Es una herramienta de autoconocimiento y exploración interna que nos ayuda a entender nuestro subconsciente. Se escribe a diario (o con frecuencia).
¿Por qué es bueno hacer journaling?
Para procesar emociones y pensamientos. En ocasiones, podemos encontrarnos abrumados por las cargas del día a día sin entender completamente de dónde proviene la pesadez de nuestra mente.
Hacemos journaling para desestresarnos, planear objetivos, mejorar la salud mental, aumentar la creatividad, reducir la ansiedad y reflexionar sobre nuestras experiencias.
¿Cuál es el objetivo del journaling?
Cuando empieces a hacer journaling, notarás los siguientes beneficios:
- Conexión contigo mismo
- Claridad en la incertidumbre
- Mejor manejo de emociones
- Control del estrés y la ansiedad
- Habilidad para resolver problemas,
- Comunicación efectiva, y más.
¿Qué tipos de journals hay?
- Journaling tradicional
- Rapid Blogging
- Journaling de gratitud
- Journaling de metas
- Journaling de emociones
¿Qué es la técnica de journaling?
Hay una técnica para cada personalidad:
Journaling tradicional
El más común es el diario tradicional, donde vas escribiendo lo que sientes como lo sientes. No hay un orden ni reglas, solo se trata de expresar nuestras emociones.
Rapid Blogging
El Rapid Blogging, técnica creada por el diseñador Ryder Carroll, consiste en escribir de manera rápida usando íconos que representan acciones o conceptos. No hay un orden específico, se basa en la creatividad. Esta técnica te ayuda a organizar tu presente y futuro, trabajando con la visualización y mezclando texto con elementos visuales.
Journaling de gratitud
Como Drew Barrymore, podemos tener un diario dedicado a agradecer. Plasmar las buenas acciones de los demás y resaltar el lado positivo de la vida sirve como un recordatorio de la luz en medio de la oscuridad.
Journaling de metas
Para alcanzar objetivos, hay que plasmarlos. Con un diario dedicado a escribir metas a largo y corto plazo, podemos crear un plan de acción con los pasos necesarios para cumplir nuestros sueños.
Journaling de emociones
Puede ser complicado al inicio, pero si en nuestro journaling de emociones combinamos colores, figuras y dibujos, podemos entender mejor nuestras vivencias y encontrar patrones.
¿Cómo comenzar a hacer journaling?
Para empezar con el journaling, necesitas: un cuaderno (puede ser una libreta, hojas de papel o una agenda), lápices, plumas y marcadores de colores, además de stickers o post-its.
Busca un lugar tranquilo para escribir y sé constante (puedes establecer horarios o dedicar un día a la semana para esta actividad). Explora las diferentes técnicas de journaling hasta que encuentres tu favorita. Puedes ver videos en YouTube e inspirarte en las maneras creativas en que las personas plasman sus ideas.
¿Cómo tener un diario en la computadora?
Aunque puedes hacer journaling en la computadora o en un iPad, escribir a mano desencadena una serie de reacciones psicomotoras. Se logra mayor concentración y la misma escritura puede transmitir mucho sobre nuestro estado de ánimo.
Ahora ya lo sabes. Ten confianza en ti misma, atrévete a conocer lo más profundo e intenso de tus pensamientos y emociones con el journaling.