Fernando Cuautle nos responde esta pregunta
Nominado al Ariel por la cinta Nuevo Orden del galardonado director Michel Franco, Fernando Cuautle es un actor reconocido a nivel mundial por sus personajes, y en lo privado, es un joven que sabe que para llegar lejos se debe estudiar.
Para él, el ser actor no significa sólo aparecer en la televisión, o simplemente aprender un diálogo, es algo más.
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Es por ello que quisimos platicar con él para conocer cómo es su proceso actoral y cómo puede una persona llegar a estar en un proyecto tan grande como en los que ha participado.
¿Cómo fue para ti tomar la decisión de ser actor?
De pequeño no tenía esa idea de querer ser actor, más bien yo iba muy bien en la escuela, tenía muy buenas calificaciones, de hecho mis compañeros de clase me decían que iba a ser contador, porque iba muy bien, y hasta me la creí, pero algo había ahí que me decía que no, y cuando llegué a la prepa hice un repaso de los años que había pasado en la escuela y me di cuenta que había hecho cosas de teatro, y que eso realmente me gustaba, entonces decidí meterme a un curso de actuación y ver qué pasa, en lo familiar estaba en un momento difícil, y como actor en escena te liberas y yo estaba desequilibrado con mi familia y no encontraba lo que iba a ser a nivel profesional, así que fue verdadera libertad, nunca pude ya salirme de ahí, estudié cuatro años y me vine a la Ciudad de México, porque soy de Puebla.
Estaba leyendo tu biografía y justamente te quería comentar que estudias mucho, veo que tienes muchísimos cursos, ¿tienes un gusto muy grande por aprender?
Creo que para ser actor es muy importante. A veces, algunas personas me preguntan «¿cómo le hago?, ya quiero estar ahí», y realmente hay mucho trabajo atrás, no estoy hablando de los actores naturales o No Actores, esa es otra forma de expresión, eso es un destello de suerte que puede tener alguien, pero si quieres ser actor eso no va a pasar de la nada, hay que estudiar, prepararse, y al final todo sirve para la actuación, porque entre más habilidades tengas, mayor es tu oportunidad de quedarte en un papel, siempre estoy aprendiendo más para que en cuanto llegue algo esté preparado.
Claro porque al final, ustedes interpretan a cualquier persona. Mañana te dicen «necesito a un actor que patine», y tienes qué hacerlo.
Totalmente, y es también enfrentar el miedo, porque cada quien tiene sus miedos, por ejemplo a mí nadar se me complica, no sabes cómo batallo con eso. Le tengo miedo al agua, entonces hacer algo así me cuesta mucho, y he tomado clases, y es un miedo que tengo que vencer, porque sí representa una barrera, porque al final no puedo decir que no, así que es ir rompiendo con cosas que te han pasado.
En este momento estás muy joven, pero ya has hecho grandes títulos, ¿te ha cruzado por la mente llegar a dirigir?
Ya empecé con pequeñas cosas de producción, porque sobre todo me llama la atención eso, de dirigir sí, pero todavía es algo más arriba que requiere otros conocimiento, o al menos así lo percibo, lo veo un poco más complejo, pero producir sí, ya he producido proyectos que han sido seleccionados en festivales, creo que es algo que también me gusta.
Es un paso natural, ¿no?
Sí, y además te vuelve empático con las otras áreas, así te das cuenta que cada cosa tiene su por qué, y su complejidad, esto te vuelve más completo como actor, porque ya sabes que cada quién tiene un trabajo y cada persona de la producción tiene un valor.
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