“El arte es magia liberada de la mentira de ser verdad”, dice Theodor Adorno y no hay nada más mágico que la visión de una mujer en el arte.
Desde que el hombre es hombre, la mujer ha pintado, ha expresado sus ideas a través de las artes plásticas, pero con el paso del tiempo y el cambio de las ideologías, las mujeres se han visto relegadas a ser espectadoras, aunque de vez en cuando existen grandes explosiones de talento y rebeldía.
Estas diez mujeres lo hicieron a través de su personalidad y visión del mundo. Recorremos cada centuria, década y año hasta nuestros días. Con mujeres que han demostrado que lejos de ser taimadas, debemos de celebrar el balance entre visiones, que una no siempre debe pesar más que la otra y que en nuestro mundo enorme, cambiante, así como efímero, cabemos todos.
LAS MUJERES QUE NOS DIERON ARTE, VISIÓN, VOZ Y REBELDÍA
En este brevísimo recorrido viajaremos de inicios del milenio pasado hasta finales del siglo veinte, visitando la vida de artistas plásticas que al igual que sus compañeros hombres, crearon piezas que nos demuestras ese brevísimo momento del tiempo que vivieron, disfrutaron, sufrieron y existieron en plenitud femenina.
Así mismo te dejaremos los museos en donde resguardan sus obras, que esperamos, te sea posible visitar para celebrar a estas piezas clave del arte universal.
SANTA HILDEGARD VON BINGEN
Nacida a finales del siglo primero en lo que actualmente es Alemania, fue una mística, científica, compositora, pintora, escritora, abadesa, filósofa y polímata. Sus obras acompañan tres grandes textos en los que describe, a través de sus visiones, cómo existe el universo, las ciencias y la teología de su tiempo.
Fue la primera mujer occidental, de la que se tiene registro, en hablar sobre el orgasmo femenino y la belleza de este, sin tapujos, pero sí con respeto, incluso algunas de sus obras muestran esta explosión mística que recorre todo el cuerpo.
Dónde ver su obra: los tres manuscritos unidos en un solo volumen, son llamados “Riesencodex” y se conservan en la biblioteca de la Escuela Superior de Rin-Meno.
SOFONISBA ANGUISSOLA
Nacida en Cremona, actualmente Italia, Anguissola, es considerada la primera mujer de éxito considerable en el ámbito de la pintura durante el renacimiento. Su forma de pintar le valió la invitación de Felipe II para ser parte de su séquito de pintores de cámara.
Educada hasta su temprana adolescencia en su natal pueblo en Italia, Sofonisba encontró el camino para llegar a Roma donde conocería al propio Miguel Ángel, quien le daría consejos sobre cómo pintar y desarrollar el talento que había cosechado antes.
Cabe mencionar que su educación pictórica se vio truncada por su sexo, ya que se consideraba de mala educación que una mujer -especialmente noble, como lo era ella-, viera un cuerpo desnudo o pintar con modelos vivos.
Debido a este impedimento, se valió de otros recursos para poder trabajar el retrato y las poses naturales, como el utilizar su propio rostro y a su familia en poses casuales, que le ayudaron a entender la anatomía femenina y masculina. Durante su estadía en la corte de España, se le adjudica un importante papel como eslabón entre el retrato italiano y el español en el siglo XVI
Dónde ver su obra: Museo del Prado, Madrid
LAVINIA FONTANA
Educada en una familia de artistas, comenzó su carrera a una edad muy temprana. Con un temperamento fuerte rompió los estándares al ser la primera mujer en pintar mujeres desnudas. También aprovechó el talento de su marido -un pintor del taller de su padre-, para crear los fondos de sus obras y poder terminarlas mucho más rápido.
Gracias a su talento fue elegida pintora oficial de la corte del papa Clemente VIII. También obtuvo el mecenazgo de los Boncompagni. Fue elegida como miembro de la Academia di San Luca. Con la muerte del papa Clemente VIII en 1605 fue designada retratista de la corte del papa Paulo V.
Dónde ver su obra: El Paso, Art Museum.
HILMA AF KLINT
Nacida en Estocolmo, Hilma fue una de las primeras mujeres en ser formada académicamente en una universidad de las artes en Europa.
Se le reconoce por ser pionera en el arte abstracto. Sus primeras obras datan de 1906, cuatro años antes de que Kandinsky las popularizara por todo el mundo y por mucho tiempo se le atribuyera su conceptualización.
Debido a lo moderno de su arte, la propia Hilma decidió que no mostraran sus pinturas abstractas hasta pasados veinte años de su muerte, por lo que pasaron muchas décadas para que se descubriera este fascinante hecho.
Sus obras posteriores a la universidad, se crearon, gracias a que era aficionada -como casi cualquier persona de su época- al espiritismo y las filosofías que afirmaban la existencia de otros planos de existencia.
En su obra abstracta, en la que destaca la pintura de gran formato, se encuentran elementos recurrentes, como círculos concéntricos, óvalos y espirales.
Dónde ver su obra: Fundación Hilma Af Klint, Estocolmo
MARÍA IZQUIERDO
La pintora feminista mexicana que ha sido olvidada por las propias mexicanas. Una mujer fuerte que luchó por la igualdad de las mujeres, lejos del cuidado de un hombre. Izquierdo nació en Jalisco a principios del siglo pasado y moría en la pobreza en la Ciudad de México.
El talento de María por crear obras coloridas, figurativas, surrealistas y expresionistas, la llevo a ser la primera mujer mexicana en exponer una obra fuera de México, en el año de 1930.
La exposición se llevaría a cabo en el Art Center Gallery de Nueva York, para después ser vista en el MET. Con el tiempo sus piezas viajarían por todo el mundo incluyendo: París, Tokio, Los Ángeles, San Francisco, Rio de Janeiro e incluso Bombay.
Dónde ver su obra: Museo Nacional de Arte, Ciudad de México, México
LOÏS MAILOU JONES
Educada en la Escuela de Bellas Artes de Boston, gracias a una beca, Jones fue una destacada artista plástica que se inspiró en el arte africano llevado -a la fuerza- al caribe y sus orígenes en el continente.
Gracias a su maestría pictórica y los temas sociales que tocaba pudo crear obras que reflejaban su sentir y origen arrebatado, principalmente en París, donde expuso sus primeras obras en la década de los 30 del siglo pasado.
Dónde ver su obra: Metropolitan Museum of Art, Manhattan, New York
MARGARET KEANE
Durante la década de los años sesenta Keane fue una de las artistas más populares del mundo. Con sus pequeños de ojos gigantes y tétricos vendió miles de dólares en obras, incluso llegando a la Casa Blanca con un retrato de John Jr. Y Caroline Kennedy.
El desfortunio de Margaret llegaría al enterarse que nadie sabía que ella era quién pintaba los cuadros y no el otro Keane de su casa -su marido-, quien se aprovecho de la timidez de la artista para hacerse de fama y fortuna.
Bajo amenaza de muerte, la mujer pintaba encerrada en su casa, hasta que decidió liberarse y retar a un duelo de pintura al impostor de su marido. Con el tiempo llegarían a juicio y el jurado dictaminaría que Walter Keane debía dar una retribución de 4 millones de dólares por daños emocionales y menoscabo a la reputación de su ex esposa.
Donde ver su obra: Museo Nacional de Arte Moderno, Ciudad de México, México