miércoles, febrero 12, 2025
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    Saint Laurent presenta Primavera-Verano 2025 en Paris Fashion Week

    Una seducción que emerge de la elegancia es lo que Anthony Vaccarello evoca en Saint Laurent.

    Saint Laurent regresó a sus headquarters en Rue de Bellechasse, donde Anthony Vaccarello hizo su debut, para presentar su colección Primavera-Verano 2025. En medio de una pasarela azul cobalto, las modelos presentaron una visión al mismo tiempo referencial como fresca.

    Vaccarello es preciso, metódico, obsesivo incluso. En las últimas temporadas el diseñador se ha centrado en la exploración de un gesto o una idea, y todas las posibilidades que ofrece.

    Desde la icónica Saharienne a los vestidos de medias que requirieron horas para configurar delicadamente, su determinación por lograr su visión es palpable. Y en esta colección creo una de las mejores propuestas de la temporada.

    Bella Hadid regresó a la pasarela en Saint Laurent.

    ¿Cómo fue la colección Primavera-Verano 2025 de Saint Laurent?

    Esta vez, su fijación fue la figura misma de Saint Laurent. Así como en su presentación masculina en marzo, el desfile comenzó con iteraciones de trajes completos con camisa y corbata con un corte impecable. Las modelos incluso lucían lentes de armazón grueso, tal como los prefería Yves.

    Anthony citó una entrevista de alrededor del año 2000 donde Saint Laurent respondía quién era la mujer para la que diseñaba. Catherine Deneuve lo explicó en su momento de forma sucinta:

    «Saint Laurent diseña para mujeres con una doble vida. Su ropa de día ayuda a las mujeres a entrar a un mundo lleno de extraños. Le permiten ir a donde sea que quiera sin provocar atención no deseada, gracias a su cualidad un tanto masculina. Sin embargo, para la noche, cuando puede escoger su compañía, la vuelve seductora».

    Esta dualidad se manifestó en la pasarela, donde después de la sastrería emergieron algunos vestidos largos a la Loulou de la Falaise, complementados con joyería statement y chaquetas de cuero o gabardinas.

    El clímax llega hacia los últimos looks, donde Anthony hace un tributo al glamour de Yves a finales de los años 80. Particularmente las chaquetas de brocado metálico recuerdan a los sacos que Yves realizó en 1988, inspirado en las obras de Van Gogh.

    Acompañándolas, diferentes blusas y faldas de encajes y plisados crean un look clásicamente elegante con actitud de sobra. De morado, a verde, azul y fucsia, esta sinfonía de colores cerró una colección que confirma el eterno poder de seguir tu instinto.

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