Encontrar jeans que nos ajusten del dobladillo a la cintura es algo así como encontrar un unicornio: básicamente imposible. Si no es una u otra medida, algo nos va a fallar. Mi amor por los jeans acampanados me orilló a comprarlos en la sección de mujeres y mi talla tenía piernas muy largas.
Si tienes una máquina de coser semiprofesional o tienes una costurera o sastre a la mano este consejo te vendrá como anillo al dedo para aquellas ocasiones en que necesitas ajustar el largo de tus jeans sin perder el efecto de su dobladillo.
Toma en cuenta que este tip funciona para aquellos pantalones de mezclilla que han pasado por un proceso de deslavado. Si usas jeans de raw denim o selvedge, es más probable que no necesites este truco.
¿Qué materiales necesitarás para arreglar tus pantalones?
- Una greda o pluma de tinta borrable para marcar las medidas.
- Una regla y escuadra.
- Alfileres o clips para costura
- Hilo para coser mezclilla
- Tijeras de sastre
- Descosedor
¿Qué hacer cuando tienes que ajustar el dobladillo de unos jeans deslavados?
Vas a tomar tu par de jeans y colocarlos sobre una mesa. Con tus reglas marca las medidas de cuanto quieres recortarle a tus jeans y súmale 1 cm para la costura. Después, levanta el dobladillo, cuidando que el original coincida con la línea que marcaste. Mantén los jeans en esa posición con alfileres o clips
Después haz una costura al filo del dobladillo para unirlo a la nueva altura. Quita los clips y pruébate los pantalones para comprobar que te quedaron a la altura que querías. Si no es así, con el descosedor ve cortando poco a poco los hilos de la costura que hiciste y repite el proceso.
Una vez que ya tengan el largo deseado y estén cosidos, puedes recortar el excedente de mezclilla, dejando un centímetro. Y listo, ya arreglaste tus jeans.
Si tu no tienes manos hechas para coser (como es mi caso), solo lleva tus jeans con un sastre y explica la especificación de que quieres preservar el dobladillo original.
Ahora que ya sabes este truco, la decisión es tuya si quieres levantar el dobladillo o llevarlos a arreglar sin que se pierdan los mejores detalles de tus jeans.
