‘Es como un mapa del tesoro, que te puede ayudar a encontrar la manera de encontrar cosas hermosas sobre ti mismo que puedes compartir con el mundo’, comenta el locutor Tim Tamashiro en su charla TED. Está hablando de un concepto japonés llamado ikigai.
Más que una simple palabra, el ikigai es una razón de ser, una mezcla entre lo que amas, lo que se te da bien, lo que el mundo necesita y por lo que puedes ser remunerado. ‘Tengo que advertirte, requiere esfuerzo’, confiesa el orador.
¿Qué es el ikigai?
El ikigai es un concepto japonés que significa ‘razón de vivir’ o ‘razón de ser’, representando el propósito personal que impulsa a una vida plena y feliz.
Se visualiza como la intersección de cuatro elementos fundamentales: lo que amas, lo que se te da bien, lo que el mundo necesita y por lo que te pueden pagar.
Encontrar el ikigai es un viaje de autodescubrimiento y crecimiento constante que permite vivir con significado y plenitud tu recorrido en la vida; promoviendo tanto el bienestar individual como la contribución colectiva.
¿Cuál es el origen del concepto ikigai?
El origen del concepto ikigai se encuentra profundamente arraigado en la cultura y la filosofía japonesa, especialmente en la isla de Okinawa, una de las ‘zonas azules’ del mundo, famosa por la longevidad y la vitalidad de sus habitantes.
El concepto ikigai, que se traduce como ‘razón de vivir’ o ‘razón de ser’, tiene sus raíces en la cultura japonesa, especialmente en la longevidad de la isla de Okinawa. La palabra combina ‘iki’ (vida) y ‘gai’ (valor o beneficio).
En la filosofía japonesa, el ikigai es un viaje continuo de autoconocimiento y propósito vital, que motiva a las personas a mantenerse activas incluso después de la jubilación, lo cual estudios confirmaron la longevidad de los habitantes de la isla.
¿Cómo encontrar tu ikigai personal?
Encontrar tu ikigai, o ‘razón de vivir’, es un profundo viaje de autodescubrimiento. Implica una introspección honesta y hallar la intersección de tus pasiones, talentos, las necesidades del mundo y tu potencial remuneración.
El modelo más difundido para encontrar tu Ikigai se basa en un diagrama de cuatro círculos superpuestos. Las intersecciones de estos círculos son cruciales.
Cuando amas y se te da bien, encuentras tu pasión; si amas y el mundo lo necesita, defines tu misión; si el mundo lo necesita y te pueden pagar por ello, descubres tu vocación; y si se te da bien y te pueden pagar, construyes tu profesión.
Para hallarlo, se aconseja la autoobservación constante, que te permitirá explorar y experimentar nuevas facetas de ti mismo.
Es fundamental ser honesto contigo mismo. Aceptar que tu ikigai puede evolucionar a lo largo de tu vida y buscar desafíos como oportunidades intrínsecas de crecimiento.
¿Qué relación hay entre ikigai y felicidad?
La relación entre ikigai y felicidad es intrínseca y profunda, es el núcleo de esta filosofía japonesa que busca el propósito de vida. Recuerda que el ikigai no persigue la felicidad como un fin, sino como la consecuencia natural de una vida vivida con propósito.
Esta felicidad no es efímera, sino sostenida, producto de vivir con un sentido claro y un propósito definido. Aquí, las acciones personales se sienten valiosas y contribuyen a algo más grande.
¿Cómo aplicar el ikigai en la vida diaria?
Aplicar el ikigai diariamente va más allá del autodescubrimiento; implica integrar hábitos y mentalidades que fomentan una vida más consciente, plena y feliz, con principios universales adaptables a cualquier rutina.
Una forma clave de incorporarlo es definiendo tu propósito, que puede ser tan simple como una meta diaria o semanal que te motive y genere satisfacción. Un claro ejemplo es aprender algo nuevo o ayudar a alguien.
La filosofía japonesa del ikigai también te invita a encontrar la felicidad en lo cotidiano. Practica la gratitud a diario y disfruta conscientemente de rituales simples. Es fundamental mantenerse activo, tanto física como mentalmente a través de actividades como la lectura o el ejercicio.
Tomate las cosas con calma. Aplica el concepto japonés de ‘hara hachi bu’ (comer hasta el 80% de plenitud) a todas las áreas de tu vida. Esto significa evitar saturar tu agenda, priorizar el descanso y la reflexión, y limitar las distracciones digitales.
El ikigai promueve la atención plena (mindfulness). Entrena tu conciencia para vivir el presente, evita la multitarea y concentrate plenamente en una sola actividad. Haz que cada momento cuente.
¿Qué beneficios aporta vivir según el ikigai?
Vivir según el concepto del ikigai es una filosofía de vida que aporta una multitud de beneficios tangibles e intangibles que tiene muchos beneficios, los principales son:
- Mayor felicidad y satisfacción personal.
- Aumento de la longevidad y la vitalidad.
- Reducción del estrés y la ansiedad.
- Mayor resiliencia y capacidad de afrontamiento.
- Mejora de la salud mental y emocional.
- Mayor productividad y enfoque.
- Fomento de la contribución social.
- Equilibrio y armonía en la vida.
- Desarrollo personal continuo.
El ikigai, descripto por Tim Tamashiro, es un verdadero ‘mapa del tesoro’ para descubrir lo más precioso de ti para compartirlo con el mundo.
El concepto, traducido a ‘razón de vivir’ o ‘razón de ser’ fusiona lo que amas, lo que haces bien, lo que mecesita el mundo y por lo que puedes ser remunerado. Requiere esfuerzo, sobre todo mental, pero sus recompensas son inmensas.
