Comediantes como Matt Rife y Jo Koy han decidió alienar por completo a las mujeres en su stand-up. ¿Qué está pasando?…
En los últimos dos años hemos visto una serie de comediantes de alto perfil o en ascenso darle la espalda por completo a las mujeres, o simplemente ser transfóbicos. Jo Koy, el anfitrión de los Golden Globes, no logró inspirar risas con su burla a la película de Barbie, reduciéndola a una muñeca de plástico con pechos grandes. Al darse cuenta de que realmente no daba risa, le echó la culpa a su equipo de escritores y criticó al público.
Matt Rife se volvió popular entre mujeres en TikTok por su capacidad de interactuar con el público en sus shows de comedia, pero también por ser físicamente atractivo (para algunas). Sin embargo, con su primer especial de Netflix decidió alienar por completo a su fanbase.
La señal de advertencia fue una entrevista en donde hizo todo lo posible por separar su imagen de sus fans, aclarando que, aunque su audiencia es mayormente mujeres, su comedia es “más para los chicos”. Y luego se estrenó Natural Selection y abrió con un chiste sobre violencia doméstica, bastante poco imaginativo. Para responder a las críticas publicó una “disculpa” a Instagram con un link que redirigía a una tienda de cascos para personas con discapacidad.
Dave Chapelle es otro ejemplo. El comediante estadounidense ha ocupado demasiado tiempo de su vida haciendo chistes que refuerzan la retórica de las TERFs. Después adjudicó el suicidio de su amiga comediante trans Daphne Dorman a las críticas que recibió después de defender a Chapelle.
Blancos fáciles, humor nulo
La respuesta a esta comedia ofensiva ha sido un rechazo contundente. El internet no tiene paciencia con las personas que deciden generar controversia y virar hacia cierto público y luego llorar cuando los “cancelan”. Todo el discurso que repiten sobre la “Cultura de la Cancelación” es deshonesto. Nadie les prohíbe insultar personas con su comedia, pero nadie tiene obligado a aceptarlos.
Es particularmente siniestro notar como entre comediantes y podcasters hombres o es costumbre hacer sus chistes incompletos a expensas de mujeres, personas con discapacidades y la comunidad LGBTQ+. Son chistes que recurren al insulto y al shock sin necesariamente algo de creatividad o punchlines inteligentes. No tienen nada que decir además de «Miren, un trans, ¡Qué peligro!».
La misoginia es de esperarse, pero es curioso ver como una estrella de la comedia que ascendió gracias a las mujeres, decide ver a su audiencia como si no tuviera valor porque no son hombres. 2023 fue el año de las mujeres económicamente hablando, Taylor Swift, Barbie y Beyoncé fueron las personalidades que más ventas generaron en todo el año por su talento y habilidad. Decidir abandonarlas también es una decisión mala monetariamente hablando, como lo detalló Drew Afualo en TikTok.
La lección en esta situación es, por un lado, ser mas escéptico con a qué celebridades decides volverte fan y, por otra parte, a no subestimar el poder de las mujeres. Matt Rife y Jo Koy tendrán que aprender con la experiencia. Chapelle no aprenderá.
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