Uno de los elementos más importantes del maquillaje…
El papel que juega el blush en nuestra vida ha incrementado con el tiempo siendo uno de los productos favoritos para alcanzar la apariencia de belleza natural que se ha vuelto tendencia en los últimos años.
Hoy se utiliza de diferentes maneras con un sinfín de técnicas para recrear todo tipo de looks, pero siempre ha estado presente siendo reconocido como un sinónimo de elegancia en diferentes culturas.
Vigente a través de la historia
Es un cosmético que se aplica en las mejillas para crear el efecto de estar ruborizada. Inició en la antigua Grecia y Roma elaborados con componentes como flores y frutas.
En la Edad Media ya era considerado un símbolo de salud recurrente entre las mujeres de la nobleza. Su evolución era notorio con el pasar de las décadas al usar ingredientes como carmín y ámbar para alcanzar nuevas tonalidades.
Para la década de los 2000 los materiales de fabricación se alejaron de sus orígenes al implementar sustancias sintéticas dando como resultado una variedad de tonos y texturas. Hoy su aplicación consta de diferentes métodos desde las brochas, barras y nuestros dedos.
El protagonista del makeup routine
Entre las numerosas tendencias se ha robado el spotlight, es una parte fundamental de las rutinas empleadas por influencers que le han perdido el miedo a la intensidad.
Las fórmulas se han adaptado a los patrones de consumo actuales saliendo del tradicional polvo para lograr una imagen «effortless» que acerca a la búsqueda de la naturalidad.
El mejor amigo de las It Girls
Las estrellas del momento se han dado a la tarea de motivar a los consumidores a manejar este producto para tener un aspecto de frescura y juventud, el mismo que ellas emanan en sus fotografías.
Personajes como Selena Gomez y Hayley Bieber son responsables de incrementar su popularidad lanzando al mercado rubores líquidos y compartiendo en redes imágenes de sus rostros pigmentados.
No se limita solo a las mejillas, sus nuevas composiciones permiten que se utilice en los párpados y frente quitando terreno a otros artículos.
Escoger correctamente nuestro blush puede facilitar el día a día en el maquillaje, así como una mala selección nos aleja del efecto pintoresco que buscamos.
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