Dejando atrás los paradigmas, una conversación para romper tabúes.
Dos mujeres destacadas en sus respectivos campos se reunieron en el evento «Love Yourself» de Marie Claire para abordar dos temas importantes, con sus experiencias y trayectorias ofrecieron una conferencia titulada «Maternidad y Dismorfia Corporal».
Dulce María, integrante de una de las bandas más importantes de Latinoamérica, ha alcanzado el éxito con RBD. Sin embargo, su estatus de superestrella no la ha alejado de las mismas dudas y problemas que enfrentamos todos al lidiar con nuestra imagen. Platicó con Nilda Chiaraviglio, psicoterapeuta especialista en relaciones de pareja, sexología y diversidad sexual.
La mente es el motor del cambio
¿Cómo se puede abrazar la individualidad cuando la sociedad no lo permite? Esta es la cuestión planteada por Dulce María y que Nilda Chiaraviglio, siempre directa y concisa, responde de manera contundente: «Si renuncias a ser diferente, renuncias a ser libre».
La cantante de RBD analiza las influencias de belleza que las mujeres encuentran en internet, un espacio lleno de filtros y carencia de autenticidad que dificulta a los usuarios alcanzar una realidad fabricada, llevándolos a preguntarse «¿Qué debo cambiar?».
Nilda Chiaraviglio, no ajena a este dilema, redirige la conversación hacia el cerebro, la pieza clave que debemos engañar para mantenernos centrados. Destaca que este órgano determina nuestra identidad y es moldeable, por lo que resulta sencillo entrenarlo para resistir la tentación de compararnos en situaciones que así lo requieran.
Dismorfia corporal y las expectativas de las redes
Conocemos a la extrovertida Dulce María que domina el escenario, pero detrás de esa imagen también ha experimentado sentimientos de duda. Compartiendo su vivencia personal y creencias, nos relata cómo enfrentó las expectativas después de convertirse en madre.
Cuando se anunció el inicio de su gira mundial, a pesar de sentirse feliz, tuvo que lidiar con sus propios miedos. Sin embargo, el amor por sus seguidores fue su principal motivación, llevándola a ofrecer el espectáculo de su vida. Nos recuerda que, aunque siempre mantuvo una sonrisa en el escenario, trabajó arduamente para aprender a amarse.
Con estos pensamientos en mente, le plantea a la experta la pregunta: ¿Cómo puedo aceptarme cuando los estereotipos pesan sobre mí?, Nilda responde: «Lo que piensas determina tus sentimientos y acciones». Hace hincapié en el poder del subconsciente y en la importancia de nuestras decisiones, recordándonos que cualquier cosa incómoda puede ser transformada.
Aunque es vital buscar apoyo profesional, el primer paso siempre lo damos nosotros mismos. «No hay problema que resista a una decisión», concluye Nilda.
Maternidad, un trabajo de dos y un reconocimiento conjunto
Dulce María y Nilda compartieron sus experiencias al momento de dar a luz, ambas con vivencias diferentes pero coincidiendo en algo: se les ha enseñado a las mujeres que ser madre duele y que el dolor es parte de la ecuación, lo cual es una mentira.
Reflexionando sobre la depresión postparto, la especialista en relaciones de pareja nos dejó una frase: «Se nos ha enseñado que tenemos que matar a la mujer para ser mamás». Esto conduce a que muchas mujeres pierdan el rumbo de su autonomía.
¿Qué debemos hacer para no perdernos? Desde el inicio, antes de quedar embarazadas, se deben establecer acuerdos con la pareja, hablar de deseos y expectativas. Además, debemos amarnos a nosotras mismas en cada momento. «Nunca dejé de estudiar, nunca dejé de trabajar, nunca dejé de viajar, nunca dejé de ser mujer, por decisión propia».
Dulce María le preguntó a la experta cómo podemos liberarnos del miedo, salir de la ignorancia y cambiar nuestro sistema de creencias. «Primero, identificando cuáles son esos miedos, el dolor, la tristeza, la alegría, todas las emociones, tanto positivas como negativas», responde Nilda.
«Si reflexionas y te das cuenta de que no te gusta pensar de cierta manera ya que te genera sentimientos desagradables, ¿qué puedes hacer al respecto? Puedes entrenar a tu cerebro para pensar de forma diferente, sentir de otra manera y actuar de manera distinta. De esta forma, las consecuencias en tu vida también serán diferentes».
Dulce María acertó en todas sus preguntas representando la voz de toda una generación. Al final, Nilda nos recordó que tenemos el poder para enfrentar cualquier problema, destacando que existen tres pilares fundamentales: la repetición, la decisión y la voluntad.
Estas expositoras inspiraron en el evento, llevado a cabo en General Prim, con sabiduría y vulnerabilidad, cada una aportando desde la empatía para lograr amarnos a nosotros mismos.
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