Lideres de redes sociales ofrecieron testimonios, disculpas incluso. ¿Realmente encontrarán soluciones a los males del internet?
En un momento histórico, Mark Zuckerbeg y otros líderes de las redes sociales Discord, X y Snap ofrecieron testimonio ante el Comité Judicial del Senado de Estados Unidos, y una audiencia llena de padres de víctimas. Esto es parte de una discusión y examinación continua sobre el rol de estas empresas en la proliferación de bullying, promoción de discursos de odio, estándares de belleza dañinos y explotación sexual.
La sección 230 del Communications Decency Act en Estados Unidos protege a las compañías de demandas por material publicado por sus usuarios. Esto podría cambiar, sentando un precedente de responsabilidad para empresas como Meta cuando usuarios abusen de sus herramientas.
No es ningún secreto que los algoritmos de las redes sociales han polarizado comunidades. Sus efectos se pueden observar en las actitudes respecto a la política, y otros temas como el feminismo y derechos LGBTQ+. Al crear discordia y tensiones en internet, las interacciones les ayudan a generar más ganancias. Durante la audiencia la senadora Marsha Blackburn confrontó a Zuckerberg por documentos internos que estiman el valor de un usuario adolescente a lo largo de su vida en 270 dólares.
Tristeza, desconfianza y rechazo justificado
Entre los asistentes estuvieron familiares de víctimas que se suicidaron a raíz de que fueron extorsionadas con fotografías intimas que compartieron a través de redes como Snapchat o Facebook. Mark Zuckerberg ofreció una disculpa a ellos, diciendo que “nadie debería pasar por las cosas que sus familias han sufrido”, enfatizando que Meta hace esfuerzos por evitar más tragedias. Esta disculpa viene después de que se le interrogó y reconoció que no ha indemnizado a ninguna persona que sufrió daños por las redes sociales.
A pesar de que los directivos comparten todas las acciones que emprenden para reforzar la seguridad y evitar la diseminación de contenido de abuso infantil, muchos desconfían de su honestidad. De las compañías citadas, solamente Snap ha apoyado un proyecto de ley que les quitaría la inmunidad a empresas de comunicación contra demandas.
El problema es que actores de mala fé busca y encuentra formas de sobrepasar límites y medidas de control. Es algo que pasará y seguirá pasando. El rol de las empresas de comunicación es reportar a las autoridades y reforzar su seguridad. Los senadores creen que, al abrirlas al litigio, las redes sociales tomarán más en serio su rol para combatir el abuso infantil. Porque las disculpas vienen demasiado tarde para algunos, pero por lo visto, no son suficientes para nadie.
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