Louis Vuitton se luce con desfile «Voyager» en Shanghai

Un viaje futurista, un voyager con estilo.

En los días previos a la pasarela, aparecieron imágenes del trabajo de Sun en Shanghai, la ciudad más internacional de China, proyectadas en el exterior de centros comerciales y estampadas en paredones en distritos comerciales y locaciones pertinentes al estilo de moda de la ciudad. 

Para Louis Vuitton, la marca de lujo más grande del grupo LVMH, China continúa representando una de las oportunidades de lujo más importantes del mundo, incluso a la desaceleración económica mundial, los consumidores de China obstaculizan la crisis y aportan al crecimiento.

El desfile itinerante denominado «Voyager» se estrenó en Shanghai a horas de la noche. Vimos dobladillos asimétricos y chalecos de cuero cuadrados. Más de 1.000 invitados, incluyendo celebridades internacionales como Cate Blanchett y estrellas locales como Zhou Dongyu y Jackson Wang, disfrutaron de la colección previa al otoño diseñada por el director artístico femenino Nicolas Ghesquière.

La pasarela se llevó a cabo en el Long Museum, diseñado por Atelier Deshaus, en el distrito artístico ribereño de West Bund. Incluía piezas realizadas en colaboración con el artista Sun Yitian, radicada en Beijing, quien pinta minuciosamente fotografías de animales de plástico inflados, incluidos patitos, gatos y conejos. Se incorporaron reimpresiones de sus obras en los diseños de apertura de la exposición. 

Bad Kiss N Dreams de Chu.W empezó a sonar y ahí vimos la primera modelo desfilar un abrigo de corte en A recto color rosa y estampados de la artista Sun Yitan. La vibra se sintió muy cool, fresca y entretenida. La agenda futurista e inmaculada en confección de Ghesquière sigue sintiéndose, por ejemplo con las correas en el pecho de lo que parte el corte del vestido, camisón o abrigo recto. 

Los accesorios en su mayoría contaban con estampados inspirados en el arte de la artista Sun Yitan, invitada a colaborar, y esto le dio a la colección un toque jovial y divertido.

Chaquetas de motociclista oversize, con detalles de infinidad de hebillas, drapeados abiertos en escote promulgado de colores crema y gargantilla, vestidos de corte a la cintura con falda de bubble skirt reconstruida bien fuera unicolor o con estampados que crean profundidad en el atuendo la colección es una oda futurista y desafiante al la apocalipsis pero con estilo. 

Muy colorida pero muy neutral, muy decorada con estampados pero a su vez sencilla, muy adornada en peplums, chaquetas sobre chaquetas, chalecos con detalles voluminosos y todo en cortes geométricos, fue una colección que nos invita al futuro y nos da esta invitación haciéndonos sentir elegantes pero con mucho poder. Cierta piezas son un poco andróginas, pero en su mayoría la mujer pre-fall de Ghesquière es desafiante, valiente y poderosa. 

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