Iniciativa que ayuda al medioambiente y a nuestro bolsillo…
De todas las tendencias que nos ha dejado el año la mejor tiene que ser el upcycling una manera de vestirnos sin afectar tanto al medioambiente demostrando que la moda no se encuentra solo en grandes almacenes.
Con el tiempo el tabú de las prendas de segunda mano ha ido desapareciendo resaltando que tener buen gusto no es un tema de poder adquisitivo sino de creatividad e intuición. Son muchos los influencers que invitan a sus seguidores a crear sus propios estilos y unirse a tendencias como el armario cápsula, una de las muchas maneras en las que podemos formar parte de la moda sustentable.
¿Qué es upcycling?
El término viene de la combinación de dos palabras inglesas, upgrade significa actualizar y recycling es reciclar, juntas dan paso al upcycling también conocido como reutilización creativa. Su función es darle una segunda vida a los productos sin que pasen nuevamente por un proceso de producción.
Fomenta la economía circular, alarga la vida de las prendas, reduce la contaminación e impulsa la imaginación. El término ha ido tomando mayor presencia en diferentes industrias resaltando en los textiles.
¿Cómo funciona el upcycling en la moda?
Estudios han demostrado que la ropa al llegar a los tiraderos puede permanecer ahí por más de 200 años. Otras cifras indican que el calzado y la ropa generan más del 20% del desperdicio de agua. El impacto ambiental que tiene la industria de la moda es muy alto y por ello aplicar este método debe ser una prioridad.
Marcas emergentes como Marine Serre, 1/OFF y Patagonia han demostrado que reutilizar prendas no le quita calidad a sus creaciones y que la moda sustentable se puede convertir en tendencia. La ropa de segunda mano y vintage ha tomado protagonismo creando una nueva forma de negocio.
Beneficios de consumir moda sustentable
Celebridades se han unido a este movimiento repitiendo vestimenta en más de una ocasión para diferentes salidas o alfombras rojas, un ejemplo es la princesa de Gales Kate Middleton quien ha asistido a más de un evento con la misma ropa y en cada ocasión logra darle un toque diferente.
Aplicarlo en nuestra vida trae beneficios personales, es una manera de cuidar nuestro dinero y no caer en las numerosas tendencias que cambian cada mes. Comprar inteligentemente nos ayuda a largo plazo con prendas que no se rompen o deslavan fácilmente, evita el greenwashing y apoya a marcas locales.
Ser parte del upcycling es más fácil de lo que parece, existen bazares que han ganado popularidad motivando la compra de segunda mano e incentivando la compra responsable.
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