Símbolo de belleza, estética y clase, el tacón es el calzado más hermoso y detallado de todos.
Recuerdo que cuando era niña, mi parte favorita de los outfits de mamá eran sus tacones. No importaba si iba a una fiesta o a reunirse con sus amigas; tenía un par para cada ocasión. Cuando tuve mi graduación de secundaria, rogaba por los míos y me di cuenta de que, además de bellos, eran dolorosos.
Hoy, no puedo evitar coleccionarlos y, en cada salida, si tengo oportunidad, me los pongo. Así como yo, desde hace años, miles de mujeres se han enamorado de ellos por su historia longeva e impactante.
Un par que impacta la cultura popular
Imagina esto: un mundo donde Marilyn Monroe camina sin altura, Carrie Bradshaw sin sus Manolo Blahnik, Lady Gaga sin sus plataformas surrealistas, o un planeta en donde no existiera Christian Louboutin. Una verdadera pesadilla. Pero antes de ellas, tenemos que viajar al pasado para entender el rol tan importante que tienen en la feminidad de la mujer y por qué hoy en día son considerados el zapato del sexo.
Pocos modelos en la industria del footwear han sido promocionados tan exclusivamente como femeninos como los tacones de aguja modernos, explica Summer Brennan, autora del ensayo-memorias “Tacco Alto”, escribe:
«Para bien o para mal, los tacones altos son hoy en día el calzado femenino más público. Es el zapato que se usa en eventos, para lucirse o actuar, y el que destila autoridad y mundanidad. Le hemos dado el poder de transformarnos, y somos una cultura obsesionada con la transformación femenina» agrega la escritora.
Historia de los tacones y su evolución por el mundo
Iniciamos en la antigua Persia, en el siglo X, donde los jinetes usaban plataformas para mayor estabilidad y control de sus caballos. En la antigua Grecia y Roma, los actores de teatro usaban una especie de sandalias con alturas para destacar en el escenario. Un poco irónico que fueron los hombres quienes los usaron primero.
En el Renacimiento, este tipo de calzado pasó de ser usado por una clase trabajadora a ser decorado con materiales costosos y usado entre los nobles, cambiando su estatus y formando parte de la moda. Durante los años de Luis XIV, rey de Francia, las zapatillas altas estaban vinculados con la masculinidad. A pesar de ser rechazados por la iglesia católica y los grupos más conservadores, su auge se extendió por más regiones de Europa.
Después de la Revolución Francesa, con los cambios internos de la nación, nació el odio hacia la opulencia, por lo que los hombres dejaron de utilizarlos, pero siguieron siendo populares entre las mujeres, aunque los diseños variaron, especialmente en su tamaño, para adaptarse al estilo de vida de ese momento.
En el siglo XX, explotó la creatividad y nacieron nuevas formas, colores, texturas y variedad en tamaños. Salvatore Ferragamo fue uno de los diseñadores que cambió su dirección y se asoció con la liberación femenina. Se hicieron famosos por ser utilizados por celebridades como Marilyn Monroe.
Hoy en día, en la moda contemporánea, son sinónimo de individualidad. Aunque populares entre mujeres, se ha ido eliminando su relación con el género, siendo piezas de inclusión y diversidad. Christian Louboutin y Manolo Blahnik cambiaron para siempre la historia al escuchar las necesidades de sus clientas e imponer tendencias con piezas hermosas, creadas con estándares de calidad y exclusividad.
¿Por qué los tacones están relacionados con la feminidad?
Los medios de comunicación han influido bastante en la percepción, retratando a las modelos en las pasarelas como las personas más bellas del mundo, caminando en vueltas de prendas de lujo, arreglos costosos, maquillaje impecable y, sobre todo, con un par de piernas largas y esbeltas que solo toman mayor proporción cuando se usan con tacones.
Son un símbolo de poder y sexualidad. Según la sociedad, solo los usan aquellas que quieren ser vistas desde lejos, llaman la atención y son seguras de sí mismas, porque, como siempre, la belleza de la mujer está atada al dolor.
Nos muestran videos de niñas que se los ponen a los 8 años, de secretarias sensuales que entregan cafés con 12 centímetros extras mientras corren por las calles con una sonrisa, y de otras chicas que no tuvieron la práctica suficiente y terminaron tropezando en la calle o en eventos.
Son un arma de doble filo que solo las más «expertas» saben usar, y por eso mismo, cuando alguien los usa, automáticamente eleva el atuendo, no solo por ser bellos, sino por ser valiente y exponerse a un momento embarazoso si no saben caminar correctamente.
Adaptabilidad en la era de la comodidad
Ahora que los roles de género han cambiado, también la mentalidad de cómo usarlos. En internet, las búsquedas para «Tacones que no te lastiman los pies» demuestran que la feminidad ya no está relacionada con el dolor y que la comodidad está tomando lugar.
Debemos darle crédito a la pandemia, donde casi por un año dejamos nuestras mejores piezas en el armario y las chanclas eran nuestras mejores amigas. Cambiamos para siempre la manera de vestir, demostrando que se han alternado a lo largo de la historia en los pies de mujeres y hombres.
Pero seas del equipo de tenis o del equipo de tacones, la realidad es que debes tener al menos un par. Altos o medianos son una declaración de estilo. Hoy se usan por gusto y no por obligación, y quienes los llevan muestran su esencia en cada paso.
Te puede interesar:
En tacones y vestido, así hace ejercicio Mariah Carey
La curiosa historia detrás de los tacones de aguja
¿Dónde puedes comprar el vestido que Anne Hathaway usó en Roma?